García destaca la labor de los jóvenes, algunos autistas, en Corrubedo y la Illa de Sálvora

La conselleira de Política Social, Fabiola García, destacó ayer la importancia de los programas de voluntariado juvenil para contribuir a conservar y poner en valor el patrimonio natural de Galicia. Lo hizo durante la visita que ha realizado a ocho jóvenes que desarrollan varias actuaciones ambientales en la Illa de Sálvora y a otro grupo de 20 que trabajan en labores de mantenimiento del complejo de dunas de Corrubedo, en las que también participan personas con autismo.

Durante la visita, a la que asistieron la directora xeral de Xuventude, Cristina Pichel, y la de Patrimonio Natural, Belén do Campo, la titular de Política Social recordó que la Xunta impulsa las intervenciones que se están realizando en estos espacios naturales y que éstas se enmarcan en el proyecto europeo Lewo (Life Evergreen with Volunteers).

Se trata de una iniciativa que se realiza entre los meses de marzo y junio en diez hábitats protegidos de la comunidad autónoma: las fragas do Eume y las del Mandeo; los parques naturais de Baixa Limia-Serra do Xurés, el de los Ancares y el de la Serra de la Enciña da Lastra; las dunas de Corrubedo y el parque nacional das Illas Atlánticas, formado por las Cíes, Ons, Cortegada y Sálvora. Alrededor de 100 personas, entre los 18 y los 30 años, forman parte de los grupos de voluntarios que participan.

Fabiola García explicó que este programa cumple varios objetivos ya que ayuda a potenciar el patrimonio natural gallego y fomenta el respeto por el paisaje y el medio ambiente y, al mismo tiempo, favorece la implicación de la juventud en el cuidado de la naturaleza "e impulsa un voluntariado inclusivo e con vocación formativa", subrayó.

La conselleira hizo hincapié en que Galicia es un referente en materia de colaboración ciudadana, con más de 8.000 personas que participan activamente y 970 entidades inscritas.