Noia reconvertirá en centro de día con unidad de alzhéimer la antigua fábrica de curtidos de A Chaínza

El proyecto incluye un centro de interpretación dedicado a la actividad llevada a cabo en el complejo y un albergue turístico

Ruinas de la antigua fábrica de curtidos de A Chaínza, en Noia / c. de noia

Ruinas de la antigua fábrica de curtidos de A Chaínza, en Noia / c. de noia / suso souto

El Concello de Noia prevé iniciar tras el verano las obras que convertirán las ruinas de la antigua fábrica de curtidos Cadarso, ubicada en A Chaínza, en un centro de día con sesenta plazas y una unidad de alzhéimer con otras quince.

El alcalde, Santiago Freire, está a la espera de que la Dirección Xeral de Patrimonio dé luz verde a los cambios que este organismo ordenó realizar en el proyecto.

La actuación diseñada para la rehabilitación de las viejas construcciones tendrá un presupuesto de ejecución de 1,3 millones de euros (a los que habrá que sumar otros 180.000 euros para el equipamiento).

La actuación será cofinanciada por las consellerías de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda y Política Social e Xuventude y el Concello.

Paralelamente, se va a crear en ese lugar un centro de interpretación de la industria del curtido y, en una de las construcciones del viejo complejo industrial se habilitará un albergue turístico con 25 plazas, que costará 470.000 euros y que se financiará con cargo al Fondo de Cooperación de Medio Ambiente, el Concello y una ayuda de Agader para el Grupo de Desenvolvemento Rural 25, en el que están incluidas las comarcas de Muros-Noia, Sar y Arousa-Norte. La construcción del albergue se licitará dentro de unas semanas, según el mandatario.

En cuanto al centro de interpretación, se restaurarán y se pondrán en valor las piezas y elementos existentes entre las ruinas. También se hizo un exhaustivo estudio etnográfico sobre la industria del curtido y sobre la antigua fábrica Cadarso, que estuvo en activo desde el año 1700 hasta finales del siglo pasado. Además, el ejecutivo local prevé habilitar una amplia zona de esparcimiento en los terrenos municipales colindantes. Dispondrá de una ayuda del Plan de Sostenibilidad Turística en Destinos del Gobierno central.

El complejo que acogerá el futuro centro de día está a sólo 600 metros del centro urbano.

Los orígenes de la fábrica de curtidos de A Chaínza, situada en la parroquia de Obre, se remontan al año 1700. En el siglo XIX pasó a pertenecer a la familia Cadarso, siendo Blas Agra Cadarso su último dueño.

La citada fábrica fue uno de los mayores exponentes de la industria del cuero y, después de décadas de abandono, fue adquirida por el Concello de Noia en el año 2010.