Los dos acusados de robar en una casa de Fisterra e incendiarla lo niegan y dicen que solo estuvieron "mirando las mareas"

Los dos hombres acusados de robar en el interior de una vivienda de Fisterra y, a continuación, prenderle fuego, han declarado que no se reconocen en las grabaciones que muestran supuestamente a los procesados en las inmediaciones del inmueble en la noche del suceso.

"Yo no soy el de las imágenes, no reconozco ni a él ni a mí", ha dicho uno de ellos, en alusión al otro encausado. No obstante, han admitido que el día anterior estuvieron en el municipio coruñés "mirando las mareas".

Ambos han negado los hechos que se les imputan y por los que la Fiscalía pide para ellos 22 y 25 años de prisión. Lo han hecho en el juicio celebrado en esta jornada en la sección primera de la Audiencia Provincial de A Coruña y que continuará este martes.

Durante la vista, los acusados han reconocido haber estado en Fisterra el día anterior a los hechos "mirando las mareas" pero no la noche de autos. "Él iba al buceo y yo fui para vigilarlo para que no le pasara nada", ha explicado uno de ellos.

El propietario de la vivienda afectada, por su parte, ha declarado que "a los seis o siete meses de ser el incendio" creyó haber visto a uno de los acusados por la calle. "Incluso me parecía que llevaba prendas de mi hijo encima", ha puntualizado.

Respecto al inmueble, ha asegurado que "quedó todo en ruinas, la casa está siniestro" y ha lamentado que "algunos vecinos" tuvieron que ser trasladados al hospital por inhalación de humo durante el suceso.

HECHOS

Los hechos, según recoge el escrito de acusación, se remontan al 13 de septiembre de 2020, cuando los dos acusados, presuntamente, robaron objetos del interior de un vehículo en Fisterra, entre ellos las llaves de una vivienda de esta localidad.

En torno a una hora después de este robo, los procesados, sostiene el Ministerio Público, entraron a robar en la vivienda con las llaves y, posteriormente, le prendieron fuego, poniendo en riesgo la vida de las personas.

Del interior de la vivienda, los encausados se llevaron varias prendas de ropa, numerosos relojes, zapatillas deportivas, una cadena de oro con una cruz, un anillo de plata, una cadena de plata, un móvil y una tablet, al tiempo que, con las llamas, provocaron que se quemasen 2.500 euros en metálico.

Los habitantes de la vivienda no se encontraban en su interior en el momento de los hechos. La casa, unifamiliar y adosada, sufrió importantes desperfectos, por valor de más de 100.000 euros.

Fiscalía considera a ambos acusados, con antecedentes por otros robos, autores de dos delitos de robo con fuerza, en vehículo y en casa habitada, y de un delito de incendio con peligro para la vida e integridad física de las personas.