Dotan las oficinas móviles de atención al peregrino con desfibriladores

Las cinco oficinas móviles de atención al peregrino, una por cada provincia gallega y otra de refuerzo, con las que la Guardia Civil presta asistencia en el Camino de Santiago estarán desde este martes dotadas con desfibriladores semiautomáticos (DESA) para actuar en caso de posibles emergencias sanitarias.

El conselleiro de Presidencia, Xustiza e Deportes, Diego Calvo, participó esta mañana en O Pino en la entrega de estos materiales al instituto armado y desde allí aseguró que las rutas jacobeas son un destino turístico seguro, que cuenta con numerosas medidas y efectivos de vigilancia y asistencia.

En el acto, además de Calvo, participaron el general de la Guardia Civil de la zona de Galicia, Miguel Ángel González Arias; el director de Emergencias e Interior del Gobierno gallego, Santiago Villanueva; o el alcalde pinés, Manuel Taboada.

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Con esta nueva dotación, los agentes destinados a la atención en el Camino dispondrán de una herramienta fundamental para actuar con inmediatez en caso de paradas cardiorrespiratorias, de la que ya disponen también las agrupaciones de Protección Civil de los ayuntamientos gallegos.

Los desfibriladores semiautomáticos son dispositivos portátiles de fácil uso, puesto que incorporan guías visuales y auditivas, para identificar y tratar paradas cardiorrespiratorias mediante la aplicación de descargas controladas destinadas a restablecer un ritmo cardíaco efectivo en las personas afectadas.

Además de la dotación con estos materiales, el conselleiro recordó la importancia de seguir formando a las fuerzas y cuerpos de seguridad en el manejo de estos dispositivos para asegurar una respuesta adecuada en situaciones críticas.

Calvo remarcó que, aunque el Camino de Santiago es “muy seguro”, es importante trasladar también una “sensación de seguridad” a los cientos de miles de peregrinos que lo recorren cada año.