‘Charos’ únicos para cada novia

Natural de Vedra, aunque actualmente afincada en Sanxenxo, la diseñadora Charo López ha conseguido en poco más de tres años conquistar a novias de toda España con sus tocados únicos y personalizados. Tanto es así, que sus creaciones han adoptado su nombre, y muchas de la novias que demandan sus servicios lo hacen pidiendo directamente “un Charo”, dejando bien claro que buscan algo especial.

Son piezas en las que combina múltiples materiales: porcelanas elaboradas por ella misma, distintos metales, cristales, circonitas, perlas... pero, sobre todo, destacan porque en cada tocado Charo trata de “captar la esencia de la novia para que sienta que ese trabajo fue hecho para ella”, afirma.

Cada tocado es el fruto final de un proceso que comienza, siempre que es posible, con una entrevista personal con cada novia, lo que le permite a Charo López captar esa esencia de cada una de sus clientas para luego poder plasmarla en la creación. Después dedica una media de entre dos y tres días de trabajo en el taller para dar forma a cada tocado, que entrega acompañado de un número de serie y una certificación de autenticidad, con el sello de la marca Artesanía de Galicia.

A su taller acuden novias de toda Galicia, pero también de otros muchos puntos de España (Madrid, Andalucía, Valencia, Castilla y León, entre otros), e incluso más allá. Recientemente ha enviado una de sus piezas a México. De hecho, un cincuenta por ciento de sus creaciones traspasan las fronteras gallegas.

Charo asegura estar “muy contenta” por el reconocimiento y la buena valoración que está teniendo su trabajo a pesar del poco tiempo que lleva en este sector, en el que se inició como un hobby y al que decidió dedicarse profesionalmente después de varios años trabajando en el mundo de la hostelería.

Se formó en Madrid y Andalucía y en 2018 impulsó su proyecto personal bajo la marca Artesanía de Galicia. Además de crear tocados también hace editoriales de moda que le han permitido darse a conocer más allá de Galicia.

Charo López participó además en las tres últimas ediciones de la Mostra do Encaixe de Camariñas, colaborando con las diseñadoras Edith del Valle y Amaya Fernández. Este año debutó en solitario con unos tocados en los que las plumas y las flores fueron dos de los elementos destacados de su colección, la cual exhibió en los desfiles de ArtEncaixe.

Aunque inicialmente veía complejo adaptar el encaje a sus tocados, después de su experiencia en la feria de Camariñas planea la creación de una colección específica en la que las puntillas sean las protagonistas

Eso sí, siempre apostando por la la personalización y la originalidad de sus diseños, pues tiene claro que sus tocados seguirán llevando el sello y la esencia de su buen hacer.

No se plantea la opción de una producción estandarizada. De hacerlo, afirma, “dejarían de ser mías esas piezas a las que las novias llaman Charo”. Sus tocados seguirán siendo únicos, y quienes deseen conocerlos más en detalle pueden hacerlo a través de su espacio en Instagram: charo_lopez_atelier.