En marcha cien proyectos que van a redimensionar la industria acuícola

Marcos García y Luis Quintáns son socios de la empresa boirense de cultivos marinos Venerupisgal, que desde hace más de una década gestiona dos bateas en un polígono de A Pobra. Se dedican al preengorde de almeja babosa, fina y japónica, ostra plana y rizada y vieira. Producen cuarenta millones de unidades de semilla al año, que comercializan fundamentalmente entre parquistas de Carril (Vilagarcía) y cofradías de la ría de Arousa. Su empresa es una de las que han recibido una ayuda de la Xunta para modernización de la industria del sector acuícola, y que financian hasta el 50 por ciento de la inversión.

Marcos y Luis recibieron este año 22.000 euros, que destinaron a modernizar el equipamiento del barco bateeiro que poseen (el Venerupis) mediante la instalación de distintos dispositivos tecnológicos, como un radar o una sonda, y a aumentar la producción de las bateas.

Su empresa ya se benefició desde 2009 de más de 160.000 euros procedentes de estas ayudas de la Xunta en distintas convocatorias y que le permitió mejorar sustancialmente sus instalaciones y equipamientos.

La conselleira de Mar, Rosa Quintana, se subió este miércoles con ellos a una de sus bateas para conocer cómo mejoraron su competitividad gracias a esas ayudas.

La representante autonómica, que acudió acompañada de la directora xeral de Pesca, Acuicultura e Innovación Tecnolóxica, Mercedes Rodríguez, dijo que el Ejecutivo gallego aprobó en la convocatoria de este año ayudas por un importe global de más de 4,7 millones de euros para financiar un centenar de proyectos que implicarán una inversión total de más de 11 millones de euros, pues la Administración gallega subvenciona hasta el 50 %.

Estos apoyos, cofinanciados por el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP), tienen como finalidad mejorar la producción, la eficiencia energética y la labor de las empresas acuícolas y tienen como potenciales beneficiarios a los bateeiros, cofradías de pescadores y acuicultores que promuevan una actividad sostenible, titulares de establecimientos de acuicultura situados en las zonas terrestre, marítimo-terrestre o marítima que tengan sus instalaciones en la Comunidad.

La titular de Mar recordó que, además de esta línea de ayudas, la Xunta también aprobó seis proyectos de investigación de organismos científicos o técnicos para fomentar el desarrollo tecnológico, la innovación y la competitividad en el campo de los cultivos marinos, con un apoyo de cerca de 900.000 euros, y que está en tramitación la convocatoria de aportaciones para las empresas que registraron caídas de ingresos a lo largo del pasado año a consecuencia de la alerta sanitaria por el coronavirus.

El Ejecutivo gallego destina a esta última medida un presupuesto de 3,5 millones de euros para compensar hasta el 50 % del descenso en la facturación sufrido por las empresas acuícolas entre el 1 de febrero y el 31 de diciembre de 2020, siempre y cuando sea de por lo menos un 20 % en relación con los ingresos medios para el mismo período en los tres años anteriores (2017, 2018 y 2019).

El importe máximo de esta ayuda por beneficiario es de doscientos mil euros.