Fijan para primavera comenzar la transformación de la AC-305
La conselleira de Infraestructuras y Movilidad, Ethel Vázquez Mourelle, avanzó que las obras para transformar la carretera AC-305 a su paso por la travesía de Palmeira en calle, se licitarán a finales de año y comenzarán en la próxima primavera con una inversión de 2,2 millones de euros. Esta actuación se enmarca en el proyecto que, bajo el lema, De carretera a calle, la Xunta desarrollará de la mano de la Fundación RIA en la carretera autonómica AC-305 a su paso por los ayuntamientos de Ribeira, de A Pobra do Caramiñal, de Boiro y de Rianxo.
Ethel Vázquez y representantes de la Fundación RIA presentaron este viernes el conjunto de propuestas de intervenciones integrales para recuperar el carácter humano de la AC-305, que supondrán una inversión estimada de 12 millones de euros. El objetivo de las intervenciones, diseñadas por la citada fundación en visión conjunta con los técnicos de la Agencia Gallega de Infraestructuras, es ganar espacio para las personas, desde una perspectiva global compatible con la actividad empresarial, comercial y portuaria de cada zona.
Según indicaron desde el Gobierno autonómico, “se trata de dar prioridad a la movilidad peatonal, promoviendo aparcamientos disuasorios más alejados del centro neurálgico de actividad, mejorando el acceso al transporte público o con la ampliación de aceras”.
De manera más detallada, el proyecto recoge cinco propuestas de intervención a lo largo de 5 kilómetros de la carretera AC-305, en aquellas zonas en las que se registra una mayor conflictividad entre el tráfico rodado y el tránsito peatonal.
Por lo que respecta a la actuación en la travesía de Palmeira, esta consistirá en la renovación integral de un trecho de 1 km, al paso por la zona marítima de Ribeira para recuperar el espacio público de la AC-305 para los vecinos, con actuaciones que suponen la mejora de la movilidad y de la seguridad viaria.
Esta actuación servirá como modelo para replicar en los otros puntos de intervención, como es el caso de la segunda que se prevé acometer en el ayuntamiento de Ribeira, en Coroso, en un trecho de cerca de 1,3 km, donde se concentra el acceso al puerto, la playa, la zona comercial y otras equipaciones.
En A Pobra do Caramiñal la actuación se centrará en el trecho de 1,1 km de la AC-305 que recorre la fachada marítima, en el entorno donde se sitúa la alameda o la plaza.
En el caso de Boiro, se proponen dos intervenciones: una en el lugar de Escarabote, en un trecho de 800 metros que engloba la bajada al puerto y el área de equipaciones tradicionales; y otra en un tramo de 1,3 kilómetros en la capitalidad, donde se encuentran la iglesia o la casa del ayuntamiento.
La quinta intervención será en el municipio de Rianxo, concretamente en Taragoña, actuando en más de 400 metros, en cuyo entorno se sitúa la iglesia, la escuela, el acceso a la autovía y varios negocios.
La responsable de Infraestructuras detalló durante la presentación que se está avanzando en las propuestas para acometer las citadas actuaciones, por lo que una vez que estén concretadas se redactarán los proyectos constructivos, previos a la licitación de las obras.
de Palmeira
El proyecto para reurbanizar la travesía de Palmeira (Ribeira), en la AC-305, nace de la propuesta de la Fundación RIA, que preside el arquitecto británico David Chipperfield. Se actuará a lo largo de un kilómetro, con distintas intervenciones encaminadas a garantizar la seguridad de peatones y conductores, a potenciar el carácter de vía lenta, priorizando la movilidad peatonal, y actuando sobre el diseño integral de la calle. Así, se reordenará la sección transversal de la carretera, reduciendo el ancho de carril y creando en los márgenes franjas verdes arboladas, con el objetivo de ganar espacio para los peones y de hacer más humana la vía. De cara a reforzar la seguridad vial, se reducirá la velocidad máxima de 50 a 30 kilómetros por hora. Para priorizar la movilidad a pie de los vecinos, se instalará la plataforma única, se ampliarán las aceras y se colocará mobiliario urbano.
de un tiempo para aquí, desde las administraciones trabajan para devolver al pueblo y su gente lo que le pertenece. Así, esos espacios públicos, en los que en su día se dio prioridad al coche, hoy buscan convertirlos en espacios comunitarios y de disfrute para vecinos y visitantes. Desde la Fundación RIA, que preside el arquitecto británico David Chipperfield, siempre han resaltado la importancia de las zonas construidas y de como estas interfieren directamente en la calidad de vida del lugar. Obras que aparentemente a la vista quizás no son las más llamativas, sucede en la recién estrenada fachada marítima de Porto do Son, pero que, sin embargo, están llenas de coherencia y, lo más importante, mantienen su esencia.