Guerra abierta por la gestión y los contratos de la Escola de Música
Continúa la guerra abierta entre el Partido Popular y el Tripartito (Podemos, PSOE y BNG) por la gestión, resultados y cuadro docente de la Escola Municipal de Música de Ames. Y la oposición vuelve a la carga centrándose en que se contrata a dedo, tras haber hecho antes hincapié en el presunto oscurantismo por la falta de una partida presupuestaria única para este servicio.
Comienza el PP mirando atrás, cuando todavía gobernaba, y aporta que en septiembre de 2014 la EMMA cumplía una década de bagaje con un total de 213 alumnos matriculados. “Era un 17 % más de matrículas respecto al primer año de actividad, cuando abrió con 182 alumnos, casualmente el mismo número que en la actualidad”, reprocha.
Además, y respecto a las asignaturas impartidas, también dejan claro que se daban clases de música y movimiento, lenguaje musical y música para adultos, que se sumaban a las de piano, guitarra, violín, viola, percusión-batería, saxofón, flauta travesera y canto moderno. Lo que constituía “un abanico de disciplinas que se complementaban con clases colectivas de coro, combo, orquesta de flautas y agrupación de violines”.
El problema era que ya en aquel momento, los profesores de la escuela de música “se encontraban contratados de manera irregular y era necesario proceder a su regulación”. Y la situación siguió igual “ante la falta de determinación y previsión del gobierno –en 2015 ganaban los progresistas– para poner fin al conflicto, lo que hizo que los docentes recurrieran a la vía judicial” por sus derechos.
Mientras que se esperaban las sentencias, el tripartito decidió, siempre a juicio de la oposición maiana, “privatizar el servicio firmando un contrato el 29 de septiembre de 2017. Con una duración de un mes, respondía a la urgencia motivada por el inminente inicio del curso. Pasado ese mes, el servicio, según manifestó el gobierno local, se licitaría; pero una vez terminado el contrato, no se realizó la licitación prometida y la empresa continuó prestando los servicios de docencia, facturando mensualmente un importe de 13.117,97 euros; y así hasta el mes de junio del año 2018”.
El Concello excedía, tal como denuncia el PP, “los límites establecidos para los contratos menores y no se ajustaba al procedimiento que debería seguir, omitiéndose los tramites esenciales de las contrataciones al no tramitarse expediente de licitación”.
Fue a partir de ese momento cuando se empezaron a recibir las sentencias por las que se declaraba a los antiguos profesores como personal indefinido no fijo, “optando el tripartito actual por la readmisión”, y aprobándose en el pleno del 27 de septiembre del 2018, la modificación de la Relación de Postos de Traballo de Ames, e incluyéndose a nueve para estos docentes.
ILUSIÓN. “Parecía que, por fin, quedaba eliminados los problemas relacionados con la gestión del personal de la Escola de Música, y que la situación estaba estabilizada para el futuro; pero no dejaba de ser una ilusión”, apostillan los populares, que en la actualidad suman 6 de 21 ediles. Y están convencidos de ello porque el curso 2021-2022 volvió “a iniciarse sin el profesorado al completo por renuncia del profesor de saxofón y ausencia del de guitarra; y ante la falta de candidatos en las listas de espera para poder cubrir las vacantes el ejecutivo maiano vuelve a recurrir a la contratación a dedo mediante dos contratos menores con una duración de tres meses y por importe total de 11.999 €”.
Terminados los contratos el 21 de diciembre de 2021, se rubrican de nuevo para los mismos instrumentos otros dos por importe total de 11.232,30 euros. “Poco después, el 24 de enero de 2022, se vuelve a firmar otro contrato a dedo para sustituir al profesor de flauta travesera”, bajo un importe de 5.507,20 euros. Y recientemente, “el pasado 17 de marzo, se ha vuelto a firmar otro contrato, por importe de 6.766,85€ euros, para impartir las clases de guitarra hasta el 22 de junio”. Esta es la madre del cordero del argumentario del PP, ya que según su testimonio, “la sucesión de contratos menores encadenados, sin licitar el servicio y adjudicados a dedo, con los que se pretende suplir la falta de profesores de la EMMA durante el curso 2021-2022 supone, de momento, un gasto de más de 35.400 € sin tener que licitar el servicio”. Por ello, auguran un panorama laboral que se avecina repleto de incertidumbre.
Por su parte, a la edil de Cultura, Natividade González, no parece haberle hecho gracia que la oposición recurra regularmente a los mass media para exponer sus críticas –ni a su compañera de Podemos, que reivindica un plus de “respecto”–, si bien ambas han depositado su confianza en las redes sociales para divulgar sus argumentos.
Responde así González a la bajada de ingresos, apelando a la covid y a la suspensión de clases y cobros como causas. Además, recuerda que fue el tripartito el que “regularizó” el servicio y creó su reglamento, además de lograr una subvención de la Diputación de A Coruña para financiarla y añadir una partida propia para comprar instrumentos.
SITUACIÓN PREVIA. De esta manera, traslada que “nestes últimos anos, neste goberno, non no anterior, que era do PP, regularizóuse a situación do profesorado da escola, antes estaba en situación irregular, deuse de alta a escola no rexistro de escolas municipales da xunta, antes non estaba, creuse un regulamento propio, antes non tiña, temos una partida específica para compra de instrumentos, tampouco existía unha como tal, este ano creouse outra para actividades da escola, antes tampouco había”, aportan desde las filas del Bloque.
Pero lo que no ha querido o podido justificar la concejal del Bloque Nacionalista Galego es la manera de contratar que, a juicio de la oposición popular, es como mínimo bastante irregular. De esta forma, añade que se intentan cubrir las bajas con la máxima premura: “Se temos bolsa recurrimos a ela, e do contrario a unha empresa”, apostillando que “estamos a traballar nunha regularización de emprego público” que también llegará a esta escuela.