Se terminó la fiebre europea para el Monbus Obradoiro y toca volver a la realidad de la Liga Endesa. El equipo compostelano se medirá este miércoles, a las 20.00 horas, al Bilbao Basket en el Multiusos Fontes, recuperando la jornada dos de la Liga Endesa.
Los hombres de Moncho Fernández volvieron este domingo a Santiago tras la aciaga resaca de la Basketball Champions League (BCL). El equipo, que tenía previsto llegar a la capital gallega por la tarde, terminó regresando a Compostela alrededor de las 23.00 horas tras sufrir otro problema en uno de sus vuelos.
La carga de cansancio de la plantilla obradoirista, con problemas en sus dos vuelos y tres partidos a sus espaldas, sumada a la baja de Rigoberto Mendoza, será un factor determinante para su vuelta a la competición doméstica. Además, poco descanso tendrá el equipo entre partidos, ya que este domingo se medirá al Valencia Basket fuera de casa, el miércoles día 11 regresará a Sar para jugar contra el Casademont Zaragoza y el sábado 14 le tocará visitar al Morabanc Andorra.
Este lunes, el Alquimista de Pontepedriña y sus jugadores han vuelto a entrenar pensando en su rival más inmediato, el Bilbao Basket. El conjunto entrenado por Jaume Ponsarnau visitará compostela tras haber caído en su compromiso anterior ante el Baskonia por 92 a 72 y ganar en la primera jornada al Andorra por 95 a 73.
Moncho Fernández ofrecerá hoy su habitual rueda de prensa previa al choque para atender a los medios de comunicación en su vuelta a Santiago. Por ello, cabe esperar que el Alquimista dé algunas pinceladas con más reposo a lo que fue la fase clasificatoria de la BCL y, sobre todo, ofrezca las claves de su siguiente rival en Liga Endesa en su vuelta a casa.
Porque el Obradoiro tendrá ahora a su afición respaldándole tras haber estado durante una semana lejos de casa. Si bien, el cansancio será un hándicap para el equipo, el punto positivo será que tendrán a todo el obradoirismo entregado en el Multiusos Fontes do Sar.
La plantilla compostelana buscará devolver a sus seguidores todo el apoyo y cariño que estos le ofrecieron a la distancia, acudiendo al pabellón para apoyar a su equipo viéndolo en las pantallas de Sar. Ahora volverán a botar el balón delante de ellos para intentar celebrar la segunda vitoria en ACB.
Porque la afición santiaguesa renovó la ilusión de su equipo día tras día en Antalya y levantará a los suyos para hacer un gran trabajo en la competición doméstica tras disiparse el sueño de Europa. Toca ahora centrarse en la Liga Endesa, conseguir la permanencia y, a partir de ahí, sumar todo aquello que venga. El año pasado jugar la Copa del Rey estuvo en la punta de los dedos, por momentos se estuvo en la pugna por los playoffs y se rozó la clasificación directa a la BCL.