Pablo Hernández: «Jugamos a baloncesto por momentos como estos»

Pablo Hernández Montenegro (Santiago de Compostela, 1997) está viviendo unos playoffs especialmente emocionantes. La eliminatoria entre Monbus Obradoiro y su Súper Agropal Palencia lo ha traído de vuelta a su casa, la capital gallega, gestando en él un cúmulo de sentimientos que jamás olvidará y muchos reencuentros. Está viviendo el sueño que tenía de niño, cuando veía el Fontes do Sar lleno y deseaba estar ahí abajo, jugando.

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¿Cómo fue su regreso a Santiago para vivir un playoff contra el Obradoiro?

Fue muy especial. Ya el partido de liga que jugamos hace muchas jornadas fue un momento emocionante y tenía muchas ganas de vivirlo. En el playoff aún más, me motiva.

Tanto en liga como en el playoff habrá vivido muchos reencuentros en Compostela...

Sí, por supuesto. Sabía que iba a tener familiares y amigos en la grada, también entrenadores de mi etapa de formación en Santiago. Sé que estuvieron Ángel Castro y Nerea Arca, que me entrenaron en el Rosalía. También sé que estuvieron Paula y Maite, las entrenadoras que tuve en la selección de Santiago. Y más gente del baloncesto santiagués. También hubo gente que me escribió, compañeros del instituto que hacía años que no veía, que se acercaron al partido para poder vernos, darnos un abrazo y ponernos un poco al día. Me sirvió para reencontrarme con mis orígenes.

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Imagino que al saber que tendría al Obradoiro en la liga, estaría deseando el ascenso de su equipo y el de los compostelanos...

Cuando surgió el descenso del Obradoiro, obviamente no me alegré, porque al final uno siempre quiere que el baloncesto gallego esté lo más alto posible. Ojalá el día de mañana haya más equipos gallegos en la ACB. Pero, a la vez, también se me pasó por la cabeza el decir qué bonito va a ser ir a jugar a un pabellón donde yo vi el baloncesto desde niño, primero al Rosalía y después al Obradoiro, y poder ir a jugar allí contra el Obra. Poder jugar allí, en Sar, delante de mi familia, de mi gente y en un pabellón donde yo vi a mis primeros ídolos del baloncesto, pues es algo que me emocionaba mucho.

Menciona el descenso del Obra y ahora le ha tocado al Leyma Coruña, donde jugó...

Sí, es un momento triste porque hace justo un año, ahora mismo ya un poquito más, conseguimos el ascenso en el Leyma y prácticamente se confirmaba el descenso matemáticamente en la misma fecha. Me da lástima porque tenía compañeros en el equipo y el cuerpo técnico del año pasado, gente del club. Eso es parte del baloncesto y del proceso también, pero estoy seguro de que el año que viene volverán a intentar conseguir el ascenso.

Volviendo a la serie, estarán felices de sacar un partido en Sar...

Sí, era nuestro principal objetivo, conseguir una o las dos. Sabíamos que iba a ser muy complicado, pero a la vez creo que llegamos en buen momento, encontrándonos bien como equipo, jugando nuestro mejor baloncesto de la temporada. Sabíamos que había probabilidades reales de llevarnos uno o incluso los dos partidos en Sar. Al final, hemos conseguido ganar el segundo, venir a Palencia con el 1-1 y ahora tenemos dos partidos aquí, en nuestra casa y con nuestra afición, que es un apoyo fundamental para nosotros, que aprietan muchísimo y llevan todo el año animando y apoyando.

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¿Cuáles cree que van a ser las claves en esta serie y qué les pide Luis Guil?

Las claves van a estar en la defensa. Durante todo el año hemos hecho mucho énfasis en la defensa, el nivel físico que queremos poner y en un playoff es aún más importante. Esta va a ser una de las claves más importantes porque, el estar bien atrás, nos va a permitir encontrar nuestro ritmo en ataque, correr y subir el ritmo del partido. Luego, cuidar los detalles. Cada vez que te juegas algo como un playoff por el ascenso, la veteranía y el control del partido también es un factor importante. En los momentos decisivos, saber hacer bien las cosas y cuidar los detalles. Y bueno, Luis nos pide continuar con el trabajo de todo el año, estar muy sólidos atrás, jugar muy duros, subir mucho el nivel físico y, en ataque, libertad, confianza y jugar con nuestro ritmo.

Se está hablando de lo bien que Luis está gestionando la eliminatoria. ¿Qué opina de él?

Me parece un gran entrenador. No lo tengo que decir yo, creo que su historial lo respalda. Su currículum con la selección española, haber entrenado en el extranjero o haber conseguido ya un ascenso previamente a la ACB. Ya no es solo en la eliminatoria, durante todo el año ha hecho un gran trabajo, encaminando a este equipo en la dirección correcta para llegar a este momento preparados. En esta eliminatoria, sí que la estamos preparando muy bien, tanto él como el resto del staff, que hace un gran trabajo en cuanto a la información que nos están transmitiendo y cómo están preparando los planes de partido para poder conseguir ganar al Obra. También nosotros estamos haciendo un buen trabajo al confiar en ellos y en ejecutar el plan de partido. 

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De cara al viernes, ¿qué esperan del Obradoiro?

Espero a un Obradoiro que salga a por todas, como el del tercer y último cuarto del viernes o el segundo del domingo, que van a subir el nivel físico e intentar hacer un cambio para que, ofensivamente, puedan tener ventajas. Un Obradoiro con garra, que estoy seguro de que, con lo que nos jugamos, van a salir a por todas.

Está viviendo una temporada con una afición increíble como es la del Palencia. También ha podido tener al obradoirismo, que ya conocía, delante. ¿Es lo más bonito del baloncesto?

Sí, sin duda. Ver los pabellones así, la verdad, es que es espectacular. Desde pequeño, cuando iba a Sar, estaba a rebosar, con toda la gente cantando y animando. Es con lo que sueñas desde niño, estar ahí abajo como jugador y ver el pabellón lleno de gente. Ahora que lo estoy viviendo, jugándonos unos playoffs, es algo que me pone la piel de gallina cuando lo pienso. Es cierto que, en el momento de estar en el partido, tienes que estar centrado en él. Muchas veces lo digo y la afición del Palencia es espectacular. La de Santiago también. Estos son partidos que, aunque me encantan jugar como jugador, incluso me gustaría ver desde fuera, porque es cuando realmente ves toda la afición, todo el ruido que hace y cómo se vive. Desde dentro, muchas veces, tienes que estar tan centrado en el partido que, aunque sí lo notas y lo ves, no puedes disfrutarlo como si lo vieras desde fuera. Jugamos a baloncesto por momentos como estos.