Aspirante frente a rey: el Breo luce el título de equipo revelación en la Copa

La 86.ª Copa del Rey de baloncesto se abre hoy en Granada con Barça y Real Madrid como favoritos, dominadores no solo en España sino en Europa, a llegar al pulso por un título que despierta pasiones.

La fiesta del baloncesto nacional volverá a ser también la de las aficiones, después de que el año pasado, por culpa de la pandemia, el torneo se celebrara sin público en Madrid. La charanga, el ruido, la tensión y la emoción de los ocho colores volverán a las gradas y a las amistosas calles granadinas.

El Real Madrid, el rey de la Copa con sus 28 títulos, se enfrenta esta noche (21.30 horas) al Río Breogán, un aspirante cualificado por su gran temporada en la que será su segunda participación, tras la de 1990, oponiéndose, por tanto, la experiencia y la ilusión. La revelación de la Liga Endesa pretende trasladar esa misma etiqueta a la Copa liderados por su gran estrella, el internacional bosnio Dzanan Musa. El conjunto gallego logró una clasificación histórica y no quiere quedarse en eso. Se ve capacitado para dar la campanada.

Musa ha rendido casi toda la temporada a un nivel estelar con actuaciones como la del pasado domingo ante el Valencia Basket, en el que fue el MVP del partido con 47 de valoración y 31 puntos. Pocos le tosen a este niño prodigio del baloncesto que equiparaban con Luka Doncic y se fue prematuramente, a la vista de su rendimiento, a la NBA. De vuelta a Europa, dio un paso atrás en su carrera para coger en Lugo un impulso que le llevará lejos. Solo mira al presente y el futuro.

No es el único jugador a tener en cuenta en el equipo celeste, que ha formado un grupo cohesionado en el vestuario y en la pista. Bell-Haynes, Kalinoski, Lukovic, Mahalbasic, Kacinas, el lucense Sergi Quintela, Sakho o Iván Cruz escoltan a Musa.

Un equipo que ascendió la temporada pasada con Diego Epifanio como entrenador, que comenzó el curso actual con Paco Olmos en el banquillo hasta que optó por aceptar una oferta del Burgos, y que ahora tiene al frente al croata Veljko Mrsic.

La covid-19 afectó dos veces al Breogán esta temporada, pero tampoco le detuvo y, tras haber superado el segundo brote recientemente, llega a la cita de Granada con todos los jugadores a disposición del técnico.

Eso sí, en Granada no tendrá a su favor el factor campo. En el Pazo dos Deportes ha sacado todos los partidos adelante menos los que le enfrentaron al Real Madrid (71-79) y el Joventut (87-90). Como visitante, en cambio, únicamente ganó en su primera salida, en Burgos (62-87) y frente al Valencia (97-98).

Ese será su hándicap, pero a su favor está el hecho de que compitió en gran parte de los encuentros y con opciones de ganar, incluso ante el Real Madrid o el Barcelona.

Hay un dato curioso que no beneficia al Breogán y es que es el tercer equipo que, con el actual formato de clasificación, llega a la Copa del Rey en la temporada de su ascenso, tras el Fuenlabrada en 1999 y el Bilbao en 2020. Los dos perdieron en cuartos de final ante el Real Madrid, que también será el rival de los lucenses.

Con dudas. El Real Madrid, por su parte, llega con dudas en sus fuerzas y en algunos de sus jugadores. Diez partidos en veintidós días han socavado la energía física y mental de un equipo que acabó el año pasado a un gran nivel de juego y resultados. Rudy, Taylor y Deck están entre algodones y se han perdido los últimos partidos, pensando en la Copa y en su recuperación, pero el entrenador madridista, Pablo Laso, también comentó en la previa que tiene otros jugadores tocados como “Alberto Abalde en la espalda, Hanga en el isquio y Llull”.

Pese a todo, el Madrid es consciente de que juega “una final” y tratará de jugar con todo porque “sería absurdo reservar jugadores cuando igual el sábado no jugamos si perdemos”, apuntó Laso.

El Madrid tiene la experiencia y calidad suficiente para competir en este torneo tan exigente y en eso aventaja, en teoría, al Breogán.