Colosos de la zona: MVP’s con legado en el Obradoiro
“Sé que aquí voy a crecer”. Esta es una de las frases recurrentes cada verano -durante prácticamente cada presentación- en los nuevos fichajes para la rotación interior del Monbus Obradoiro desde hace ya más de una década. El conjunto compostelano se ha ganado con creces su fama de fábrica de pívots, sobre la pista de Sar han encontrado su hábitat particular algunos de los mejores hombres altos que han pasado por la Liga Endesa en los últimos tiempos, y bajo la tutela de Víctor Pérez, un mago que aúna paciencia, conocimientos, empatía y abnegación en su trabajo, son muchos los que no sólo han mejorado sus prestaciones, sino los que también han relanzado sus carreras cuando las lesiones o la falta de oportunidades les estaban relegando a un rol secundario.
Un dato podría confirmar este secreto a voces: 10 de los 15 MVP (Jugadores de la Jornada) que han vestido la camiseta del Obra en los últimos 12 años eran pívots... pero esta vez, como tantas otras, también las estadísticas hay que saber interpretarlas.
Víctor Pérez es consciente de que por su mano han pasado jugadores de infinita calidad, hombres clave para escribir la historia reciente de este club que en su 50+1 aniversario disfruta de su época más estable y más brillante, pero al mismo tiempo, el entrenador ayudante de Moncho Fernández explica el porqué de esta cifra: “Tal y como está hecho el apartado de la valoración en la Liga Endesa, por la que se suman todas las acciones ofensivas y se restan las defensivas, siempre un pívot tendrá más opciones de salir como el jugador destacado del partido. Suelen ser quienes hacen tiros de mayor porcentaje, dentro de la pintura, y luego tienen la opción de coger la gran mayoría de los rebotes con lo cual es otra faceta en la que aportan. Además son jugadores a los que se les suele castigar con faltas por lo que también la personal se añade, y si a mayores tiene un buen porcentaje en los tiros libres la valoración se dispara. Por eso los pequeños tienen menos posibilidades de estar en el top-10 de una Liga en cuanto a valoración”.
“Normalmente si se miran todas las Ligas o ves las estadísticas de los partidos en las valoraciones suelen estar los interiores salvo que un exterior haga un partido excepcional ofensivamente, anotando muchos tiros de 3 que suman más... casi siempre va equiparada su valoración a su anotación mientras que en el caso del pívot puede meter 10 puntos e irse a los 25 créditos fácilmente por los otros aspectos. Además, al tener menos tiempo el balón en las manos, suelen cometer menos pérdidas. Son circunstancias del juego que no les penalizan tanto”, continúa su explicación el santiagués.
“Es cierto que un jugador interior que tenga una valoración alta lo puedes calificar en élite, pero un exterior élite siempre la tendrá más baja que un jugador medio-alto interior por este motivo. Ahora en lo que nos fijamos más es en el +/- del rendimiento porque hay actuaciones individuales muy espectaculares pero esto no deja de ser un juego de equipo”, asume. En este sentido, el cuerpo técnico del Monbus fue pionero en la ACB a la hora de introducir la estadística avanzada como parte de su rutina de trabajo con Fran Camba al frente de un análisis modélico.
Sea como sea, repasar la lista de MVP’s del Obra es recuperar actuaciones indispensables de nombres ya leyenda, con pasado o presente aún en la NBA. Pero también hay a quien se echa de menos. “Evidentemente a Pustovyi, pero es que en su mejor temporada coincidió con Matt Thomas que tenía mucho protagonismo. Sobre todo su último año hizo valoraciones muy buenas”, aporta Víctor Pérez al recordar que en 10 de los 34 citas del ucraniano en el curso 2017/18 superó los 20 créditos de valoración.
“Es cierto que cuando lo fichamos él ya venía para esa posición de jugador estrella, de jugador que había jugado a un nivel muy importante en la Euroliga. Pero venía también de pasar una lesión, por eso tuvimos acceso a él. Con nosotros fue un jugador importante, un pívot que tenía mucha presencia en la pista, que se iba siempre cerca de los 30 minutos de juego y que sumaba además en las dos facetas tanto en la ofensiva como en la defensiva. Fue un jugador clave para lograr esa primera permanencia que fue histórica en su día para el Obradoiro”.
“Levon fue un jugador que fue creciendo con nosotros. Empezó en la LEB con un rol igual menos protagonista que en su última etapa, pero a la vez era un jugador que tanto tenía una capacidad para jugar en el poste bajo, que no es que lo hiciera mucho aunque era efectivo cuando lo hacía, como con su tiro de media y larga distancia que fue mejorando con el paso de los años. Era un jugador que atrás, en defensa, nos ayudaba mucho en aspectos como eran el rebote y la intimidación. Nos dio grandes momentos en su última temporada porque era un jugador importante en muchas parcelas del juego”.
“Salah fue un poco ese primer jugador prospect, al que le veías potencial. Venía de una Liga menor como la belga, con apenas dos años de experiencia en Europa pero le veíamos un potencial importante. Empezó a la par de Oriol, que era el otro 5 del equipo, y ya destacó por su gran capacidad de intimidación hasta el punto de que acabó como uno de los principales taponadores de la Liga. También tenía rebote, jugaba el pick and roll con Andrés Rodríguez y era un arma ofensiva muy buena. Ahora anda por Kuwait tras su paso por la NBA”.
“Mike ha sido de los mejores jugadores que han pasado por el Obra. Sin duda. Fue un rookie que pasó de pensar nosotros al principio ‘a ver qué puede darnos’, a rendir ya desde la pretemporada. Desde el inicio ya vimos el gran potencial que tenía y nos sorprendió que rindiera tan rápido a ese nivel. También fue un jugador que en principio empezó jugando solo en la posición de 5, pero a medida que avanzaba la temporada formó junto con Oriol una pareja letal así que lo movimos al 4 porque tenía buena mano de media distancia, no tanto desde larga aunque no se prodigaba tanto, y también un jugador con una gran capacidad de rebote que nos ayudaba mucho. Fue creciendo mucho y muy rápido, de ahí que diera el salto a la NBA sin acabar siquiera la Liga con nosotros. Ahí sigue, en Oklahoma con 31 o 32 años”.
“A Maxi tuvimos opción de ficharlo cuando venía de una trayectoria de múltiples lesiones y no acababa de tener un rendimiento bueno. Venía de S. Oliver en Alemania y desde el primer minuto veías que con su ética de trabajo podía llegar a donde quisiera. Era un auténtico currante, siempre tenía las orejas abiertas para escuchar lo que el entrenador le quisiera decir, y un jugador que con nosotros consiguió tener esa regularidad que antes no había logrado y eso hizo que fuera creciendo, que hiciera crecer al equipo hasta convertirse en un hombre tan importante. De hecho esa temporada coincide con Adam Waczynski y ambos fueron los dos jugadores más importantes, no los que en realidad tenían el pasaporte americano como eran Keaton Nankivil y Dani Miller. Los americanos entre comillas eran ellos y era por lo que habíamos apostado. Tiene ese récord de valoración en un partido además y recuerdo ese encuentro en Fuenlabrada cuando al final ya todos le daban los balones a él (acabó con 36 puntos tras un 6/6 T2, 15/16 TL, 3/6 T3, 5 rebotes, 2 balones robados y 2 tapones)”, lo analiza Víctor Pérez. “Tenía un físico espectacular, capacidad para el rebote, para el tiro de media distancia, de larga, al poste bajo... tenía muchas facetas en el juego en las que sumar y hacer valoraciones importantes. Es un jugador y una persona espectacular también en cuanto a educación. Muy respetuoso con todo el mundo, muy agradecido, de los que aún tengo relación y la etapa del Obra siempre la recuerda con cariño. Cuando pudo vino y seguramente no viene más porque no puede. Es un jugador que nos sigue desde la distancia y está siempre pendiente. Ahí continúa además en los Dallas Mavericks con Luka Doncic en la NBA”.
“Estando en la pista siempre sumaba, muy inteligente, con una gran capacidad para el rebote, que en el poste bajo se desenvolvía muy bien pero un poco lo que le falta para jugar de 4 es la regularidad en el tiro. En el triple se maneja sobre el 30%, y en los tiros libres en el 70. Pero en el poste bajo era un bailarín, jugando con muchas fintas y pivotes y con capacidad de rebote. No tenía un físico importante, sufría en la posición de 5, pero con continuidad es un hombre importante en la Liga donde es una institución”.
“Llegó un poco de tapado, de los últimos interiores que fichamos y buscábamos de él que se pudiese desenvolver tanto al 4 como al 5 porque la posición estaba ya más o menos cubierta. Venía de jugar en el 5 en su Universidad pero se abría, con capacidad de tiro de 3 y de ahí que lo viéramos también como un 4. Tenía muchos recursos en el poste bajo y en su segunda temporada mejoró mucho en el triple. Ahora en el Joventut es de los mejores triplistas de la ACB. Por sus brazos largos tenía rebote en ambos aros y mejoró en dureza defensiva pues sufría en los contactos”.
“Sabíamos que había sido importante en Lituania, fue MVP de la Liga de su país, pero también tuvo una lesión importante de rodilla que le mantuvo casi una temporada fuera y teníamos la incertidumbre de qué rendimiento podría dar tras estar parado tanto tiempo y recabar en una Liga tan física y de tanto contacto como es la ACB. Fue un impacto desde el principio. Sus carencias las suple con su inteligencia porque es un jugador que entiende perfectamente el juego y eso también hace que no necesite tanto esos recursos físicos. Desde el primer año llegó a ser MVP del mes y siempre con valoraciones buenas por su capacidad para el rebote, su juego en el poste bajo, y porque además es un pívot que normalmente recibe muchas faltas y tiene porcentajes por encima del 70 % en los tiros libres. Es de los que más faltas reciben de la Liga y de ahí esas valoraciones”.
“Le costó un poco adaptarse al baloncesto europeo, sobre todo a nivel defensivo, pero tiene un potencial enorme ofensivamente porque maneja las dos manos en el poste bajo, tiene tiro de media distancia, de larga, pick and roll y luego su presencia física también hace que en el rebote fuese un jugador importante. Además por su capacidad de intimidación y de salto le hacen sumar en valoración, porque no hay nada que castigue por la actuación atrás, que era su punto débil. También con el Baskonia sigue haciendo este año valoraciones muy buenas”.