El ataque, termómetro del Obra durante el primer tercio de curso
Cuando gana, anota 90 tantos con un acierto del 42,1 por ciento en triples y 9,8 pérdidas // En las derrotas su puntuación cae a 72,6 y su puntería, a un 25,9 %
“Aquella famosa frase de que el ataque gana partidos y la defensa campeonatos, creo que se ha muerto. Creo que el ataque gana campeonatos y la defensa gana partidos”, sostenía Moncho Fernández en una entrevista con EL CORREO en junio de 2019. El entrenador del Monbus Obradoiro ofrecía una reflexión acorde con la tendencia del baloncesto actual, y repasando la trayectoria del equipo en el primer tercio de la Liga Endesa 2021/22, cobra todo el sentido. Es el ataque el que le está permitiendo contar con cuatro victorias después de once jornadas de competición, en el primer parón del curso por las selecciones.
Extrayendo los datos de esta campaña, el apartado ofensivo parece el verdadero termómetro del Obra. En buena parte a causa del acierto, pero también por las posesiones desaprovechadas. En más de una ocasión desde el grupo se han escuchado lamentos por la falta de puntería, como tras las derrotas ante Baskonia o Bilbao. “Nuestro 4/23 -en triples- nos condenó”, justificó el propio Moncho Fernández en la sala de prensa del pabellón bilbaíno de Miribilla. Y ha habido más ejemplos.
En los cuatro encuentros que ganó, el equipo santiagués anotó de media 90 puntos, una diferencia considerable respecto a sus cifras en las siete derrotas encajadas: 72,6 tantos a favor. De hecho, en sus triunfos el Obra sumó 93 puntos en dos ocasiones (Joventut y Fuenlabrada) y 87 en las otras (Betis y Zaragoza).
El acierto también varía, principalmente en lo que se refiere a los triples. En las victorias el Obra encesta un promedio de 12,8, el 42,1 % de los que lanza. En las derrotas, 6,3, con un acierto que se desploma hasta el 25,9 %. Por eso también se ven afectados los números vinculados a los tiros de campo: 31,8 que besan la red (47,9 % de puntería) en los cuatro duelos ganados y 26 (41,9 %) en las siete derrotas sufridas hasta ahora.
Otro dato fundamental para entender esa diferencia en el rendimiento ofensivo se halla en las pérdidas de balón, con 9,8 de media en los triunfos y un tope de 13 en el encuentro ganado en la pista del Betis, y ese mismo máximo (13) como dato promedio en los siete tropiezos.
DEFENSA. Menos diferencias, o menos acusadas, se aprecian en el otro lado de la canasta al analizar las estadísticas. Demostrado ya que el Obra puede ganar partidos con el rival acariciando o incluso rebasando la barrera de los 90 puntos, algo mucho más complicado de ver hace varias temporadas, la cifra de tantos encajados no fluctúa tanto en uno y otro escenario.
Así, en los cuatro triunfos conseguidos hasta el momento el conjunto de Moncho Fernández ha recibido 82,5 puntos de media, incluso con el Joventut llegando a los 91, la segunda peor marca tras los 104 que anotó el UCAM Murcia en Sar. El Obradoiro ha perdido con el rival logrando 78 tantos (Real Madrid), 79 (Barça) o 80 (Bilbao); su media en las siete derrotas es de 86,7 encajados. En este caso, los porcentajes de acierto son similares.
Con una capacidad de anotación demostrada, el plantel asumió desde el primer día que su mayor margen de mejora radicaba en la defensa, y en ese aspecto ha exhibido menos irregularidad. Ser más constante en el tiro es el principal anhelo cuando la Liga Endesa vuelva después de la ventana FIBA.