El CD Lugo afronta una verdadera prueba de fe en su huida del pozo

Lugo. La visita al Mallorca, donde no ha ganado (seis partidos), se presenta como una prueba de fe para el CD Lugo, a la que ha llegado con solo dos puntos de margen sobre el descenso después de haber enlazado once partidos sin ganar, los seis últimos con su actual entrenador, Luis César Sampedro.

Tres empates y tres derrotas es el balance de los lucenses en la isla y también el registro con el que ha iniciado su segunda etapa en el equipo gallego el técnico de Vilagarcía de Arousa, que necesita, como el club, un triunfo que le aporte confianza y credibilidad.

Luis César debutó con tres empates y ha enlazado otras tres derrotas en las últimas jornadas que no han hecho más que agravar la situación en la que se encuentra en la clasificación.

El panorama habría sido diferente si en Girona no se le hubiera escapado el triunfo en los estertores del choque o si hubiera estado mejor en las áreas en otros encuentros (salvo en el contundente 6-1 de Las Palmas), pero la realidad es que solo ha sumado cinco de los últimos 33 puntos en juego y ha dilapidado casi toda la renta de la que disponía.

Luis César ha recuperado para esta jornada a Moctar Sidi El Hacen, que se perdió los últimos partidos por la convocatoria con su selección y el largo viaje de vuelta que tuvo que afrontar, y a los lesionados José Ángel Carrillo y Roberto Canella, todos ellos con opciones de titularidad.

En cambio, ha perdido a Marcelo Djaló, que no participó en el último entrenamiento, y siguen en la enfermería el panameño Puma Rodríguez e Iriome González, que están de baja por sus respectivas lesiones musculares.

El Mallorca, segundo, intentará reforzar sus opciones de ascenso directo a Primera con tres nuevos puntos. El club bermellón anunció ayer dos positivos en COVID. El resto del plantel está bien. CAF