El Deportivo debe ganar al líder y esperar para que se obre el milagro

Ganar al líder del subgrupo 1A, el Zamora, y esperar que le acompañen otros resultados es lo que le toca este mediodía al Deportivo en la última jornada de la primera fase de Segunda División B para obrar el milagro de acabar en el podio, sacar el billete a la Primera Federación y al mismo tiempo poder optar al ascenso a Segunda División en la siguiente etapa de la temporada.

Hace un mes, la posibilidad de que el Deportivo acabara esta primera fase entre los tres primeros clasificados se veía como un milagro. Incluso el propio técnico, Rubén de la Barrera, tras caer ante el Racing de Ferrol (1-0) el 20 de febrero, admitía que podían haber gastado la última bala.

Pero la recuperación del equipo con dos victorias seguidas, la primera ante el Pontevedra en Riazor (1-0) y la segunda, con contundencia, en Vigo ante el filial del Celta (3-0), y los traspiés en la zona alta de la clasificación le han dado vida.

Las cuentas son sencillas para los blanquiazules, pero no dependen solo de ellos: tienen que ganar al Zamora en Riazor (12.00 horas) y confiar en que el Celta B no se imponga al Coruxo en O Vao o el Unionistas de Salamanca pierda ante el Racing de Ferrol en el Reina Sofía. Con un empate ante el Zamora, quedaría en manos de una gran carambola.

El entrenador del Deportivo tiene las bajas de Héctor Hernández y Derik Osede, aunque los dos figuran en la lista de convocados para el partido, una relación en la que están presentes todos los jugadores de la plantilla y Dani Barcia, zaguero de las categorías inferiores.

Esta semana, se han reincorporado al grupo el central Mujaid Sadick, que tuvo que cumplir cuarentena por su contacto con un positivo de COVID, y el internacional costarricense Celso Borges, que dejó atrás una lesión muscular.

El venezolano Miku Fedor, que se estrenó como goleador con el Deportivo en la anterior jornada, ante el filial del Celta de Vigo, con un triplete (0-3), será el referente ofensivo del equipo ante el Zamora pese a haber tenido trabajo específico el viernes.

TRASCENDENTAL. La última jornada de la primera fase se antoja vital para el futuro más inmediato del Deportivo. La viabilidad del club está garantizada milite en la categoría que milite, pero después de perder dos categorías en apenas tres años todavía podría verse relegado un peldaño más si no consigue un puesto entre los tres primeros al término de la primera fase de la competición.

Solo los tres primeros se garantizan una plaza en la Primera RFEF y la opción de luchar por subir a Segunda. De lo contrario, aún tendría que jugar por alcanzar la nueva categoría como mal menor.