El Deportivo no logra pasar del empate a uno contra el filial del Celta

Vigo. El Celta B recibía ayer la visita del máximo rival de la entidad, el Deportivo de la Coruña. El encuentro destacó más por las emociones de los presentes que por el despliegue futbolístico que se pudo vivir, con dos equipos que aún necesitan madurar en la competición.

Los “cachorros” del Celta entraron con ímpetu en el partido y no necesitaron ni un minuto para perforar la portería de los coruñeses en un despiste defensivo. Mackay logró evitar que un primer tiro de Lautaro fuese gol, pero el balón volvería al mismo jugador que no dudo en chutar de nuevo y el cancerbero lo rechazó otra vez, con la mala fortuna de que ahora sería la cabeza de Losada la que golpearía el balón para hacer el 1-0 a los 52 segundos.

Tras el gol el partido se detuvo por el lanzamiento de pañuelos al campo, algo que no le vendría bien a los locales porque el Dépor pudo sobreponerse al varapalo.

Los de Borja Jiménez saltaron al campo para dominar toda la primera parte, aunque estuvo falto de gol ante la contundente defensa de tres centrales impuesta por el conjunto vigués. Pero en el minuto 41 el Dépor logro atravesar esa defensa. Villares recibiría un excelente pase infiltrado de Ibai que no desaprovechó para lograr el empate con un potente disparo a la izquierda de la portería de Joel.

El Celta B estuvo mejor en la segunda parte, pero los herculinos lograron dormir el partido y se conformaron con el empate. André Couce