Fase de estudio en el Obra para evaluar la viabilidad de regresar a la cancha

El pasado 20 de abril, la Asociación de Clubes de Baloncesto (ACB) aprobó por unanimidad dar por finalizada la fase regular de la Liga Endesa 2019/20 y organizar una final en sede única con los doce mejores de la clasificación. Eso terminó con la campaña del Monbus Obradoiro, pero no significó vacaciones inmediatas para el plantel, con contrato hasta el 30 de junio pese a hallarse en un ERTE (Expedición de Regulación Temporal de Empleo). Ahora, recibido el protocolo aprobado por el Consejo Superior de Deportes (CSD) para el regreso a la actividad deportiva, el club lo examina para determinar la viabilidad de volver a trabajar en la cancha individualmente o en grupo.

El CSD hizo públicas esas pautas el sábado, bajo el título Protocolo básico de actuación para la vuelta a los entrenamientos y el reinicio de las competiciones federadas y profesionales, que fue publicado el domingo en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Los clubes de la Liga Endesa lo recibieron el propio domingo por la noche y desde ayer se estudia en el Obra. En principio la idea era retomar el contacto con la pista si se recibía el visto bueno de las autoridades, pero la primera impresión es que será complicado que compense, ya que el citado protocolo establece medidas como la necesidad de desinfectar las instalaciones diariamente o realizar controles médicos. A este problema se une el hecho de que el Multiusos Fontes do Sar desmontó el parqué cuando se acondicionó para ejercer de hospital de campaña en el caso de que fuese necesario.

Incluso la Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP) publicó un comunicado pidiendo una aclaración de las instrucciones ya que el sindicato considera que es posible interpretar la obligación de desinfectar el balón al cambiar de un jugador a otro. Es una de las cuestiones que la ABP ve “incompatibles con la práctica del baloncesto o excesivas”.

Por todas esas dificultades, es complicado que se lleve a cabo un entrenamiento del Obradoiro antes del verano. En las últimas campañas se ha convertido en habitual que una pequeña parte del plantel continúe trabajando varias semanas una vez se acaba la competición. Es la fase que se suele llamar de postemporada. Actualmente, los integrantes del equipo santiagués siguen ejercitándose desde sus domicilios para no abandonar su físico, pero con unas pautas distintas desde que se acordó el final de la fase regular ya que antes se pretendía que estuviesen preparados por si había que volver a jugar.

Hacer ese trabajo en pista sería lo ideal, pero las circunstancias actuales lo complican a pesar de que los clubes profesionales pueden trabajar en sus instalaciones desde ayer. Otro impedimento es la diáspora obradoirista. Actualmente permanecen en Santiago seis jugadores: Pepe Pozas, David Navarro, Álvaro Muñoz, Kostas Vasileiadis, Vladimir Brodziansky y Dejan Kravic. Incluso aunque los demás tuviesen que volver, la mayoría tendría serios problemas por las limitaciones en el transporte a nivel mundial. Por todo ello, la opción más probable es que todos sigan desde casa el plan que les traslada el preparador físico del Obra, Rubén Vieira.

CASOS DISTINTOS. En otro contexto se mueven los doce equipos que disputarán la fase final de la Liga Endesa, pues ellos sí necesitan recuperar la normalidad. Varios de ellos retomaron ayer la actividad, aunque de forma distinta. El primero en pisar parqué fue el Morabanc Andorra, que se rige por el protocolo del Principado, muy similar al español. La mitad del plantel trabajó de forma individual y la otra mitad lo hará hoy, y así seguirán toda la semana para minimizar el contacto.

El Valencia, el Unicaja de Málaga y el Iberostar Tenerife empezaron a someterse a los exámenes médicos previos a la vuelta a la actividad física en los próximos días. El Barcelona anunció a través de su entrenador, Svetislav Pesic, que confía en hacerlo a inicios de la próxima semana; y el Bilbao comunicó que por el momento no lo hará, a la espera de detallar cómo poder cumplir con el protocolo.

El Obradoiro CAB está de luto por el fallecimiento durante la jornada de ayer del padre de Tomás Richartz, fisioterapeuta del primer equipo, después de una larga enfermedad. Tomás es parte integral del cuerpo técnico desde la llegada de Moncho Fernández al banquillo obradoirista en el año 2010 y un trabajador incansable, muy querido dentro y fuera del club. Desde aquí nuestro más sentido pésame y un fuerte abrazo para toda su familia.

Once jugadores de la Liga Endesa de baloncesto disputarán desde hoy hasta el jueves la Copa ‘Seguimos Conectados’, un torneo en el videojuego NBA 2K20 que será retransmitido en redes y en ‘Movistar+’. La plataforma lo emitirá en su perfil de Twitch y con un resumen diario en su canal de deportes. El obradoirista Álvaro Muñoz será uno de los participantes, con Edgar Vicedo y Adams Sola (Estudiantes), Javi Vega (Burgos), Fabio Santana y Beqa Burjanadze (Gran Canaria), Guillem Jou (Manresa), Marques Townes (UCAM Murcia), Arturs Zagars (Joventut), Vit Krejci (Zaragoza) y Tomeu Rigo (Bilbao).