La ACB decide limitar los tiempos muertos para dinamizar el juego

Será a partir del próximo domingo, día 19 a las 20.00 horas, cuando el Monbus Obradoiro exponga, ya sin cortapisas, su proyecto y su propuesta de juego para este curso 2021/22. Pero aunque limitados hasta ese momento por la exigencia física de la pretemporada, por la necesidad de ir guardando las armas para no dar información extra a los rivales y sin duda también por la falta de rodaje para poder construir aún al E-QUI-PO, hay aspectos que ya son evidentes en este nuevo plantel. Entre las más destacadas está la personalidad, dentro y fuera de la cancha, de Fer Zurbriggen, el nuevo número 5 del equipo compostelano. Argentino pero con nacionalidad italiana, de 23 años, MVP de la Liga albiceleste (promedió 15,2 puntos, 6,6 rebotes y 4,9 asistencias) es un jugador llamado a enganchar a la afición con intensidad y carácter dentro de la pista... y que cautiva también por su desparpajo fuera de ella. Aunque sobre todo es un jugador que insiste en que ha venido al Obra a aprender y a crecer.

Como lo está haciendo también su nuevo equipo, que este fin de semana afronta una prueba de fuego en el Torneo EncestaRías. “Hay un Obra que jugó el partido de la Copa Galicia frente al Breogán, hay un Obra que llegó el viernes, y hay un Obra que terminó jugando el último partido con Betis. Después de toda esta semana, y ya contra próximo rivales dentro del calendario ACB, vamos a mostrar una mejor versión porque también el equipo se está preparando mejor”, subraya. Y es que defiende Fer Zurbriggen que “la pretemporada es justamente para probar, seguir construyendo e intentar encontrar la mejor versión del equipo y uno en ese crecimiento tienen un margen de error y es mejor que se vea al traspié ahora y no cuando se juegan los puntos”. “El cuerpo técnico y la dinámica del equipo y del club hace que los jugadores nuevos nos intentemos adaptar lo más rápido posible. No tengo dudas de que poco a poco vamos a ir mejorando”, afirma el argentino.

El joven base ha sumado muchos minutos en estas semanas, por encima incluso de ese rol de actor secundario que se le asignó en un principio. Los galones en la dirección del Obra serán para Braydon Hobbs si su problemas en el tobillo remite finalmente. Zurbriggen confía plenamente en la recuperación de su compañero. “El quiere jugar, el quiere estar bien, y nosotros lo vemos bien que es lo más importante”, considera.

Bienvenido. Por su juventud y su vitalidad se le presupone un adicto a la redes sociales pero no es así, confiesa que es más de charlar en el cara a cara aunque ya se ha metido en algún fregado por su sinceridad desde su llegada a Santiago. “Sé que me han mandado al muere por dos cosas: por la intensidad y porque en una nota dije un fin de semana que no veía a mucha gente joven porque no habían llegado los estudiantes. Pero ahora que es septiembre hay una catarata de movimiento, empiezan las clases, y mi percepción también cambió. Me esperaba una ciudad un poco más pausada y tiene su dinámica, me gusta igual. Yo vengo de Buenos Aires, y que esto sea alegre, activa es un poco una contraposición al clima. En Argentina los días que llueve no se ve a gente en la calle, pero aquí sí siguen con su actividad y me gusta porque es una prueba de carácter”, se explica. Es a través de esas mismas redes sociales donde se puede chequear el primer veredicto de su nueva afición: Fer ha enganchado por su personalidad. “Desde el día que pisé Santiago siento que soy bienvenido y yo que soy muy sensible, muy familiero, vengo de círculos íntimos, me ayuda mucho y si encima les gusto como juego, mejor. El apoyo lo siento y me potencia”, agradece.

Al que le toca convencer ahora es a Moncho Fernández. “Estamos haciendo un trabajo muy detallado para que todo mi personalidad y carácter aprender a limitarlo, domarlo, y a saber cuándo usarlo, cuándo es positivo o negativo. Es un proceso de una reconstrucción de mí mismo que a veces es estresante pero que con el correr de los partidos y de los minutos yo lo voy sintiendo y el equipo también. Me empiezo a sentir más cómodo”, dice.

Madrid. La ACB reducirá el número de tiempos muertos de todas sus competiciones, comenzando este fin de semana con la Supercopa y aplicándose a toda la Liga Endesa y la Copa del Rey, con el objetivo de dinamizar el juego.

Con la nueva normativa disminuirán al mínimo los parones de televisión, además de limitar el máximo de tiempos en los últimos cinco minutos del segundo y cuarto periodo. Así se evitarán interrupciones innecesarias en encuentros ya decididos, como en la normativa pasada con hasta cinco tiempos muertos de televisión (dos de ellos en el último periodo).

Otra novedad es que el máximo de solicitudes por entrenador pasa a agruparse por mitades y no por cuartos, sustituyendo así un formato que obligaba a gastar sus parones antes de la finalización de cada cuarto para no perderlos. Con estos cambios el número máximo posible de tiempos (sin tener en cuenta prórrogas) se reduce de 15 a 10, y el mínimo de cinco a dos.

De acuerdo a la nueva regulación: cada equipo podrá solicitar dos tiempos en la primera mitad con un máximo de uno por equipo en los últimos 4’59” del 2.º cuarto; se podrán solicitar tres en la segunda mitad con un máximo de dos por entrenador en los últimos 4’59” del 4.º cuarto. Si no hay ninguno en los primeros 15 minutos de la 1.ª o 2.ª mitad, habrá un tiempo muerto de televisión en la primera interrupción de juego una vez resten 4’59” o menos para la finalización del 2.º o 4º periodo, respectivamente. El primer tiempo muerto de la 1.ª y 2.ª mitad durará 75 segundos y el resto 60. Cada equipo podrá solicitar uno en cada prórroga. efe