Jerubex Santiago pone las ocasiones, Zaragoza marca

No duró más allá de las dos semanas la alegría de las victorias del Jerubex Santiago Futsal, que ayer sólo tuvo la alegría de reencontrarse con su afición en Santa Isabel pero que vio truncada su racha en un partido en el que mereció más. En el fútbol (sala) goles son amores, y el único equipo que los marcó hasta un minuto del final fue el Full Energía Zaragoza, el Colo Colo de toda la vida.

Entre Sergio Eguizábal, el portero del conjunto maño, y la falta de puntería local, el cero del marcador fue castigando con el paso de los minutos el excelente trabajo general del equipo santiagués. Y lo peor es que el 1-2 es una derrota... cuando con el transcurrir de cada jornada está cada vez más prohibido perder. El Jerubex Santiago Futsal sigue colista, sigue lejos de la zona de salvación en el grupo D.

Es difícil explicar en unas líneas que el equipo blanco no marcara gol hasta que faltaban un minuto y nueve segundos para el final. El conjunto entrenado por David Rial, que mostró en todo momento su nueva cara, su intensidad, una presión que atosigó por momentos a su destacado rival, el líder que lo sigue siendo, creó no menos de doce ocasiones de gol claras para marcar. Pero se desesperó viendo cómo los minutos fueron pasando sin que la efectividad llegara.

Un minuto, el 11 de la primera parte, explica perfectamente lo que fue el partido. El equipo santiagués había salido con una intensidad y una presión muy altas, había limitado a su rival, en el minuto 2 Alán (qué joya) ya había podido marcar y en el 5 Brian lanzó al larguero en una posición franca, recto a meta.

Pero en el citado minuto fatídico para el equipo santiagués, éste tuvo hasta tres ocasiones muy claras: primero Alán no resolvió bien un dos contra uno y pasó mal a Alberto; después Cristian se topó en el mano a mano con Eguizábal; y Alán no acertó a rematar un saque desde la esquina, con el gol al lado.

Y en ese largo minuto 11 aún dio tiempo para que el Colo Colo confirmase una de sus grandes virtudes: le hace falta muy poco para marcar gol: puede lograrlo de un saque desde la banda, de una jugada al pívot, aprovechando segundas jugadas... y también de saque de su portero. Sergio sacó largo y Muniesa impuso su físico y con un gran remate de cabeza... 0-1.

Reaccionó bien el Santiago Futsal, pero más de lo mismo: cinco minutos después, ganó otra vez el físico de los jugadores en un balón dividido y entre Modrego y Tabuenca fabricaron el 0-2. No llegó antes del descanso, aunque lo siguió intentando el Jerubex Santiago Futsal (de nuevo Alán, de nuevo Sergio), el tanto que apretara el marcador.

MEJOR AÚN. Lo encomiable, el gran mérito del Santiago Futsal, es que nunca se rinde. Tras el descanso redobló, si cabía, su intensidad y desarrolló un gran juego. Bien es cierto que Brais estuvo muy acertado varias veces para evitar el 0-3, pero los minutos fueron pasando sin que el merecido gol local llegara.

A falta de diez minutos el Zaragoza cometió su quinta falta, pero no llegaron la sexta y el doble penalti. A falta de tres, el cuadro santiagués, ya desesperado, se puso a jugar con ataque de cinco, sin portero. Y a 1’09 llegó la esperanza: Porto robó y dio en bandeja a Dani Blanco el 1-2.

Pero si antes fue el paso de los minutos lo que provocó la desesperación del cinco local, ahora los segundos fueron consumiéndose sin milagro. Lo buscó el Jerubex Santiago, la tuvo principalmente Brian en un potente disparo con su cañón zurdo que desvió... Sergio Eguizábal, a falta de 47 segundos. El fútbol sala da para mucho, pero los Porto y compañía no obtuvieron recompensa a su buen hacer.