Los problemas crecen en un Santiago Futsal al que la fortuna no acompaña

El Jerubex Santiago Futsal encajó ayer una nueva derrota que evidencia que sus problemas son cada vez mayores, pero también que la fortuna no le acompaña ni una pizca. Vio cómo el Soliss Talavera remontaba en Santa Isabel (1-3) en la segunda parte, mientras los de David Rial se encontraron con los postes en cinco ocasiones.

Duele una derrota más, que se decidió con un tanto en una acción de estrategia y otro de auténtica mala suerte, obra de Alán en su propia portería. El Santiago se ancla en la posición de colista, cede puntos ante un rival directo y pese a su derroche de garra, fe y esfuerzo no logra sacudirse su mala dinámica.

Empezó el encuentro con una intensidad altísima y con un ritmo frenético que decayó algo con el paso de los minutos. La primera ocasión la tuvo el visitante Caamaño, con un disparo seco que Brais atajó sin problemas, y a los cuatro minutos llegó una de las acciones más claras del conjunto local en la primera parte. En una transición rápida, Quintás sirvió el balón a Cristian pero este llegó forzado al segundo palo y Rafa Luque evitó el gol.

El Talavera intentó aprovechar sus buenos minutos. Anass, en dos ocasiones, y Pepe rozaron el 0-1 para un equipo visitante que fue arrinconando al Santiago. Los de David Rial eran incapaces de generar juego desde atrás e intentaban sacar partido tanto de las transiciones como de los lanzamientos lejanos. Brian probó suerte con su zurda en dos disparos y también lo intentó Cristian, aunque el Santiago se acercó más al gol con un contragolpe en el que no supo aprovechar su tres contra dos y con un tiro de Alán al poste a dos minutos del descanso. Sin un dominador claro, con pocas ocasiones para ambos, el encuentro llegó a la pausa sin perder intensidad.

SEGUNDA PARTE. Se reanudó el juego y el plan local parecía centrarse en aprovechar los errores del Talavera. Los visitantes rozaron el primer gol en una doble ocasión: Brais detuvo el tiro de Kike y Sergio envió el rechace a las nubes. Entonces el Santiago se volcó. Cristian voleó al palo un balón desde la esquina, Brian lo intentó desde lejos y Alberto probó de nuevo el poste en un córner que estrelló en un jugador rival. En la acción inmediatamente posterior se inauguró el marcador. Brian puso el balón en juego desde el córner derecho y el propio Alberto lo remató en el segundo palo.

La efusiva celebración evidenció el hambre de victoria del plantel blanco, pero la alegría duró poco. Brian perdonó el 2-0 en un dos contra uno y en el minuto 28 llegó el empate. Blecua remontó la línea de fondo y asistió para que Andrés marcase. No acabó ahí la desgracia local. Cristian envió otro misil al poste en una volea calcada a la anterior y apenas un par de minutos más tarde Juanma aprovechó un despiste del Santiago en la estrategia para adelantar al Talavera. Cuando Santa Isabel aún no había digerido el mazazo, un saque de banda sin peligro terminó en la portería después de que el balón tocase en Alán.

Nunca dejó de intentarlo el conjunto compostelano, que pidió un penalti por mano y encontró su quinto disparo al poste, esta vez de Álex Ares. El partido se endureció, las protestas y las tarjetas se multiplicaron y tampoco el portero-jugador sirvió para reducir la diferencia en el marcador. El partido murió entre los intentos del Santiago.