Se cae de la agenda el Torneo EncestaRías

Ha llegado a nuestra vida -por lo menos de momento-, para quedarse, y en ese resquemor común que por momentos exige el lamento, despierta la rabia, alienta el optimismo hacia el descubrimiento de una vacuna u obliga a convivir con el miedo, el respeto y la precaución, son muchos los condicionantes del día a día causa del coronavirus. El deporte profesional goza de muchos privilegios para sentirse seguro, pero ni siquiera en su particular burbuja puede escapar de los problemas que genera la covid-19 para el desempeño de su labor.

El viernes, con motivo de la presentación de Lauryrinas Birutis en el Hospital HM Rosaleda, se enumeraron por parte del club algunas de las reglas y medidas que se han adoptado en el Monbus Obradoiro para vigilar este inicio de pretemporada. Test, desinfección, distancia social o semiconfinamiento son algunas de ellas, pero cualquier control se convierte en un más difícil todavía cuando se trata de elaborar un calendario de amistosos, pieza básica, como reconocía el director general de la entidad, José Luis Mateo, para poder acoplar a los nuevos jugadores de cara al inicio de la Liga que se fijó para el 18 de septiembre.

“La ACB está dando recomendaciones como intentar evitar desplazamientos en avión, tratar de viajar en autobús, jugar solo contra equipos ACB, hacer test antes de los viajes y que a éstos solo se sumen las personas que hayan dado negativo lógicamente, solo jugarlos en determinadas instalaciones...”, relataba Mateo que ya entonces dejaba caer que el Obra tenía pactado “algún viaje a Madrid (en principio su idea era jugar contra el Fuenlabrada a finales de este mes de agosto) para tratar de jugar dos partidos”.

La Copa Galicia, otra de las citas siempre en el calendario de pretemporada, también se retrasará, si llega a celebrarse finalmente, hasta el mes de octubre con la Liga Endesa 2020/21 ya iniciada, lo que no serviría a los intereses del Monbus Obradoiro de utilizarlo como torneo de preparación, pero quizás la ausencia que más duele, confirmada ayer aunque ya esperada, es la cancelación del Torneo EncestaRías.

El clásico de cada mes de septiembre, una iniciativa nacida en 2015 en Vilagarcía por el empeño, cariño y sacrificio de un grupo de gente del mundillo del baloncesto encabezado por Diego Doval e Iván Villar, no ha podido esta vez sortear los obstáculos que le ha puesto la covid y abrir las puertas de Fontecarmoa. Desde la Asociación Deportiva y Cultural EncestaRías se emitió ayer un comunicado lamentando la decisión pero “confiando en que en 2021 se pueda retomar una cita que se ha hecho un hueco en las pretemporadas de clubes nacionales y también extranjeros”.

DEMASIADOS obstáculos. “Los inconvenientes surgidos para un torneo de esta dimensión”, son la causa de esta resolución a la que se llegó por una cuestión de “responsabilidad” ya que entienden que se trata de “un evento hecho por y para el público”.

“Las actuales condiciones solo permitirían albergar a 300 espectadores en el pabellón de Fontecarmoa, lo que sería ir en contra de nuestros propios principios que no son otros que dar el mejor baloncesto posible a todos aquellos que lo quieran disfrutar, sin excepciones”, incluyen en su nota los organizadores que, fieles a su espíritu de nunca rendirse, avisan de que “intentaremos que el baloncesto se pueda manifestar el próximo mes de septiembre con alguna iniciativa a través de redes sociales, para que se puedan poner en valor los cinco años de baloncesto de elite vividos con anterioridad y los que quedan por vivir”.

El propio Diego Doval explica que dada la situación de pandemia se ideó para este 2020 la celebración del Torneo a un solo partido, dejando ya el formato de cuadrangular de los últimos veranos, añadir incluso un encuentro de baloncesto femenino, y sin la presencia de conjuntos extranjeros como también era habitual. El Real Madrid fue uno de los muchos clubes que mostraron su interés en formar parte de esta edición aun con todas las restricciones; y con el Monbus Obradoiro una vez más ejerciendo el papel de equipo anfitrión, se pensó en seguir adelante hasta que la falta de noticias por parte del club blanco obligó a tomar una decisión.

“Las conversaciones con el Madrid marchaban bien. Alberto Herreros (director deportivo de la sección de baloncesto) nos decía que el torneo encajaba con la política del club de retomar el acercamiento con poblaciones más pequeñas, pero con la pandemia todo se paró”, afirma Diego Doval. “No tiene sentido arriesgarse a hacer el torneo con todas las exigencias que hay a nivel sanitario, con solos 300 personas, si no es un pelotazo como era la presencia del Real Madrid, así que al final valoramos que era mejor parar todo”, añade el organizador.

Desde la Asociación Deportiva y Cultural EncestaRías no se olvidan de las empresas que siempre les han apoyado -“Creemos que es el momento de agradecérselo velando por su recuperación económica”- y ansía regresar el próximo año “con más fuerza”.