Tres victorias y una sequía de seis años antes de la visita del Barça
El Monbus Obradoiro se ha enfrentado en 21 ocasiones al equipo culé en la élite, con 18 derrotas // El último triunfo, en diciembre de 2014 bajo la guía de Kleber
Una semana más, las estadísticas juegan en contra del optimismo en el Monbus Obradoiro. Si el pasado sábado visitó a un Iberostar Tenerife al que no ha ganado nunca a domicilio y en el último mes se desplazó a dos pistas en las que lleva ocho años sin vencer (Carpena y Buesa), el próximo domingo (20.00 horas) recibe en el Fontes do Sar a un Barça que también puede recibir la etiqueta de bestia negra. Lógicamente, por entidad y nivel actual, pero también por los precedentes.
Ayer mismo EL CORREO recordaba una de las victorias más célebres en la historia del Obra en la Liga Endesa. En la temporada 2013/14, los de Moncho Fernández hincaron el diente al Barcelona (77-60) solamente una semana después de encajar una severa derrota ante el Valencia (70-102). Es el mejor ejemplo para pensar que la machada es posible después del doloroso traspié en Tenerife por 45 puntos de diferencia (107-62), pero no hay muchos más ejemplos de éxito santiagués frente al equipo catalán.
Obra y Barça se han enfrentado 21 veces en competición oficial, todas en la máxima categoría del baloncesto español, y el conjunto de la capital gallega suma tres triunfos. El último, hace seis años, el 30 de diciembre de 2014, cuando un Maxi Kleber estelar (23 puntos y 4 rebotes) lideró al bando local en el Multiusos de Sar (79-67). Desde entonces, los diez duelos entre ambos han caído del lado azulgrana, y eso sin contar sus citas de pretemporada como el Memorial Quino Salvo de 2017 o el Trofeo Xacobeo disputado en septiembre de 2019, ambos con el mismo signo: victoria culé.
Ambos clubes coincidieron por primera vez en la élite en el curso 1982/83. Era el estreno compostelano en lo más alto del baloncesto español, y en una campaña que saldó con dos victorias en su casillero, no resulta complicado adivinar que el equipo culé se llevó los dos enfrentamientos: 101-73 en el Palau y 72-122 en el viejo Sar. Ambos volvieron a citarse en uno de los días más especiales en la cincuentenaria historia del Obradoiro: el 10 de octubre de 2009, en el ansiado retorno a una categoría profesional, el Barcelona impuso su ley en Sar (63-80). Tras la caída a LEB y el posterior ascenso, el choque se ha repetido cada año.
Para encontrar precedentes positivos hay que remontarse a la primera mitad de la década. En la temporada 2012/13, el Obra firmó su primera y hasta ahora única victoria en el Palau (54-62). Un año más tarde llegó la citada machada en Sar (77-60), y en la temporada 2014/15 el último triunfo, también mencionado anteriormente (79-67).
El plantel de Moncho Fernández no necesita remontarse en el tiempo para encontrar el camino. Encadena cinco tropiezos, los dos últimos con una imagen especialmente mala ante Burgos y Tenerife, pero el mismo grupo inició la temporada con cinco triunfos en siete jornadas, hizo sudar al Real Madrid, le faltó una décima de segundo para batir al Valencia y dio la cara a domicilio contra el Unicaja y el Baskonia. En su mejor versión, el Obra ha demostrado tener argumentos para batir a cualquiera. Toca lucirla.
Santiago. Quizá no se pueda hablar de crisis, pero sí de que el Barcelona está sumido en su peor dinámica de resultados de la temporada. El equipo de Sarunas Jasikevicius perdió ayer contra el Olympiacos (88-96), encajando su tercera derrota en sus cinco compromisos más recientes contabilizando Liga Endesa y Euroliga.
Los azulgranas disputaban un choque pendiente de noviembre, aplazado en su día por los casos de coronavirus en el plantel heleno, y tenían la oportunidad de situarse como líderes en solitario de la máxima competición continental. No lo hicieron y, aunque permanecen en lo más alto de la clasificación con nueve triunfos y tres derrotas, igualan los guarismos del CSKA de Moscú.
La situación del Barça en la Liga Endesa tampoco incita a encender la luz de alarma, pues ocupa la tercera posición con un balance de 10-3. Eso sí, ya ve a tres victorias de distancia a un Real Madrid que todavía no ha fallado y ostenta el liderato.
Con el de ayer, el equipo azulgrana ha perdido tres de sus últimos cinco encuentros. Desde que claudicó contra el Asvel francés (80-68) el 27 de noviembre, el Barça cayó también en el Palau contra el Valencia, en Liga Endesa (90-100), superó al Zalgiris Kaunas (62-73) y al Herbalife Gran Canaria (91-63) y encajó otro revés en el choque de ayer, que supuso su primera derrota europea en el Palau.
Hasta su visita al Asvel, el Barça marchaba con velocidad de crucero, ya que había cedido solamente cuatro derrotas en 22 partidos entre Supercopa, Liga Endesa y Euroliga. En el primer torneo del curso fue superado por el Real Madrid en la final (72-67), en el campeonato doméstico perdió en sus visitas al Baskonia (82-71) y al UCAM Murcia (77-73), mientras que en Euroliga solo había cedido en la cancha del Zenit de San Petesburgo (74-70).
Antes de visitar Sar, al Barça todavía le queda un duro compromiso por delante, pues este viernes regresará al Palau para enfrentarse al Milán, cuarto clasificado en la Euroliga. Ó. DE LA FUENTE