El 27 % de puntos de recarga para coche eléctrico en Galicia está fuera de servicio

Suman 272, frente a los 735 operativos // En el primer trimestre se instalaron 2.115 nuevas infraestructuras en España, que sigue a la cola de Europa en electromovilidad

Un vehículo eléctrico en un punto de recarga instalado en Santiago /antonio hernández

Un vehículo eléctrico en un punto de recarga instalado en Santiago /antonio hernández / roi rodríguez

La electromovilidad no termina de arrancar ni en Galicia ni en el conjunto de España, que sigue sin acelerar el ritmo de desarrollo de infraestructuras de recarga, ocupando de nuevo las últimas posiciones en el ranquin europeo. Durante el primer trimestre, se produjo un crecimiento de 2.115 nuevos puntos de acceso público, según el último Barómetro de la Electromovilidad de la patronal española de los fabricantes de automóviles (ANFAC), sumando 20.243 operativos en todo el país. Muy lejos, por tanto, del objetivo marcado por la asociación de 45.000, más "realista", dicen, que los 80.000-100.000 establecidos por el Gobierno para este año.

En el documento se detalla que el Estado hubiese alcanzado las 26.718 infraestructuras de recarga de acceso público de no ser porque, hasta marzo de este año, hay 6.475 puntos que están fuera de servicio, un 24 %, bien sea por encontrarse en mal estado, averiados o que todavía no se pudieron conectar a la red de distribución eléctrica. En el caso de Galicia se observa que la comunidad cuenta con 735 puntos de recarga de acceso público en condiciones de ser usados y 272 fuera de servicio, un 27 % del total autonómico, que se elevaría a 1.007 infraestructuras.

Asimismo, aunque los puntos de recarga públicos aumentaron, la mayoría (1.537) son de carga lenta (máximo 22 kilovatios), representando el 73%. La red de recarga rápida o ultrarrápida, vinculada a potencias superiores 150 kW, aumentó hasta alcanzar los 801 puntos, de los que el 85% son proyectos de fabricantes de automóviles.

El ejemplo de Portugal

España se mantiene a la cola de los países europeos en el indicador global de electromovilidad, tras crecer 0,6 puntos en el primer trimestre de 2023, hasta los 11 puntos de 100, lejos del incremento del conjunto de los países europeos, que mejoran 1,3 puntos de media y cierran el trimestre con una valoración de 23,8 puntos. Anfac señala que hace falta un contexto favorable en torno al vehículo electrificado. Además, la asociación pone de ejemplo la evolución de Portugal, que gracias a los incentivos fiscales y de impulso a la infraestructura de recarga impulsó su crecimiento en un 1,9 puntos.

Las comunidades autónomas que presentan mayores crecimientos son La Rioja (1,3 puntos), Madrid (0,9) y Navarra (0,9). Galicia, en el polo opuesto, apenas mejora una décima, alcanzando una valoración de 8,5 puntos sobre 100, en la parte baja de la clasificación.

La patronal de fabricantes asegura que España avanza lentamente en materia de electromovilidad para la consecución de los objetivos fijados para 2023 en el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia marcadospor el Gobierno, que fijan en 250.000 vehículos electrificados para este año. Según indica la asociación, dada la evolución del mercado electrificado, que en el primer trimestre solo matricularon 25.447 unidades, cerraría el año en torno a las 100.000 matriculaciones. En términos de la electrificación del mercado, España alcanzó el pasado trimestre una valoración de 17,4 puntos en el indicador de penetración de vehículo electrificado, que representa un crecimiento de 0,5 puntos respecto al período anterior. España es la penúltima en esta tabla.

El director general de Anfac, José López-Tafall, afirma que los fabricantes y las marcas de automoción están liderando el esfuerzo para cumplir los compromisos y objetivos de descarbonización y emisiones establecidos por la Unión Europea. “Sin embargo, los datos registrados en el barómetro vuelven a revelar que el ritmo es muy lento y que España se queda atrás”, destacó. “Esta lenta evolución debe revertirse si queremos que la movilidad cero emisiones en el sector de la automoción en España despegue y llegar a ser un hub de la nueva electromovilidad. López-Tafall considera que hay que “reaccionar rápido” si los datos dicen que se va “lento”, mientras que propone varias soluciones: mejorar la eficiencia de los planes de ayuda, acelerar el ritmo de desarrollo de infraestructura pública y establecer un marco fiscal para que empresas y ciudadanos apuesten por la nueva movilidad.