Galicia. Sus catedrales y Santiago el Mayor
La Xunta de Galicia tiene en marcha un muy oportuno proyecto de restauración de todas las catedrales existentes en su territorio. La referencia temporal, para desarrollarlo, es hasta el Xacobeo de 2027. En todas ellas tiene una especial relevancia el culto a Santiago el Mayor, lo que se concreta en muy variadas obras de arte a poner en valor. En esta serie de siete artículos, escritos para dominicales de EL CORREO GALLEGO de este verano de 2021, se abordan algunas de las cuestiones que se consideran en el libro ‘Galicia. As súas catedrais e Santiago o Maior’ que, en la actualidad, ultima la editorial Lúdica7 y que ya cuenta con el apoyo de la Secretaría de Política Lingüística, de la Consellería de Cultura, Educación e Universidade. El libro, que opta también a las ayudas institucionales a las editoriales gallegas, se presentará a mediados de septiembre en Compostela.
GALICIA Y SUS CATEDRALES
En cierto modo a Galicia también la hicieron los caminos de la peregrinación, todos esos itinerarios que van y vuelven a Compostela teniendo como referente una tumba descubierta a la que, en el siglo IX, se vinculó con Santiago el Mayor. Él es el apóstol al que se le había reconocido, previamente, como el evangelizador de estas tierras y, después, como “amigo del Señor”, tal como se declara ya en los sermones que se recogen en el llamado Códice Calixtino.
Con el tiempo una serie de catedrales irían suponiendo los puntos de partida de una determinada organización, en lo eclesiástico, de Galicia y, a partir de ahí, aquella tumba -reconocida por Teodomiro, obispo de Iría- sería ya, desde muy pronto, el epicentro de una religiosidad, un culto, y una cultura, que llegaría hasta las más lejanas tierras. Y aquí las catedrales de Santiago de Compostela, Ourense, Tui, Lugo y Mondoñedo -enumeradas en el orden cronológico, teniendo en cuenta el inicio de su construcción- se reparten a un territorio de la que tan solo una mínima parte se corresponde con la diócesis de Astorga.
LA TUMBA DE SANTIAGO EL MAYOR Y LOS CAMINOS
La catedral de Santiago, además de contener esa tumba reconocida como apostólica, centra una archidiócesis – es decir, una sede presidida por un arzobispo- que tiene, a lo largo de la historia, a otras como sufragáneas, condición de las demás gallegas, al frente de las cuales se encuentra, en cada una de ellas, un obispo, todos ellos a relacionar con el prelado compostelano.
Pues bien, en todas estas catedrales, la presencia del culto jacobeo -visibilizado a través del modo en que se representa- va a ser muy importante siendo, en todo caso, la catedral de Santiago de Compostela el referente principal y, en bastantes casos, el modelo a seguir.
Es más, el hecho de que exista una vinculación importante, en todos los casos, con el mundo de la peregrinación acrecienta, si cabe, la presencia jacobea en cada una de estas catedrales. La de Lugo se sitúa a medio trecho entre los caminos Primitivo y Francés, formando ambos parte de su territorio en el solar gallego. La de Ourense es paso obligado en la Vía de la Plata; la de Mondoñedo, en el de la Costa y la de Tui, en el Portugués. Nada se escapa, pues, a la relevancia de una devoción que también, a su modo, articula el conjunto de Galicia.
¿CÓMO REPRESENTAR AL APÓSTOL DE GALICIA?
A Santiago el Mayor la encontraremos representado de muy variadas formas. Como apóstol aparece en diversas escenas de los Evangelios, siempre cercano a Jesús: la Transfiguración, el Lavatorio, la Santa Cena, la Oración en el Huerto, la Ascensión... También en el tema de Pentecostés y, por supuesto, su martirio, recogido en los Hechos de los Apóstoles.
Además se le muestra como peregrino y como caballero, de muy variadas formas. Su vinculación, por otra parte, con la Virgen María, en apariciones tales como las narradas en Zaragoza y Granada son también objeto de tratamiento artístico.
Otra cuestión especialmente significativa: tanto las catedrales de Lugo, Mondoñedo y Tui contaron con capillas parroquiales en su interior dedicadas a Santiago y, en Ourense, también tuvo su altar localizado, originariamente, en la cabecera del templo, a un lado de la capilla mayor, lo que supone, igualmente, una relevancia sobresaliente en todos los casos.
SANTIAGO EL MAYOR Y ESPAÑA
Finalmente, esta serie de artículos forma parte de un proyecto que nos lleva a valorar el culto jacobeo en las catedrales de España, concretamente en aquellas que tenían tal condición antes del Concordato de 1851. Se parte, en este caso, del criterio de que el culto jacobeo es especialmente brillante en el Arte Hispano, básicamente, hasta esa fecha desde el momento del descubrimiento de la tumba apostólica y, a medida, de que las tierras ibéricas se fueron cristianizando.
Que lo primero que se presente sea lo que Galicia supone, en este sentido, no deja de ser un modo de significar lo transcendental que fue la aportación gallega en lo que cabe considerar como configuración de toda una temática que quien recorre nuestra tierra se encuentra al paso, tanto en nuestras catedrales como en otros contextos; todo ello – imaginar al Santo- supone un modo de enaltecerlo, recorriendo tiempos y espacios.