La clase política fideliza su respaldo
Siete de los diez conselleiros acompañaron al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo // Los líderes del PSdeG, Manuel Vázquez, y del BNG, Guillerme Vázquez, juntos en el acto
La clase política gallega refrendó ayer su respaldo al Grupo Correo Gallego, y los más altos representantes de todas las administraciones públicas -autonómica, estatal, provincial y municipal- volvieron a arropar la gala de los premios Gallegos del Año 2010.
Presidida por el titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, la ceremonia contó con una numerosa representación de los poderes Ejecutivo y Legislativo de Galicia. Al frente del acto estuvieron además la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo; el delegado del Gobierno, Antón Louro; el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo; y los conselleiros de Presidencia, Alfonso Rueda; de Economía, Javier Guerra Fernández: do Mar, Rosa Quintana; de Cultura, Roberto Varela; Educación, Jesús Vázquez; Medio Rural, Samuel Juárez y Medio Ambiente, Agustín Hernández.
El senador y ex titular de la Xunta Manuel Fraga; los presidentes de la Diputación Provincial de A Coruña, Salvador Fernández Moreda, y de Pontevedra, Rafael Louzán. Las tres fuerzas políticas gallegas estuvieron representadas al más alto nivel. El secretario xeral del PSdeG, Manuel Vázquez; el portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, además de los diputados en el Parlamento de Galicia Fernández Leiceaga, Ruiz Rivas, Gómez Alonso; Carlos Negreira y Ana Pontón, lo pusieron de relieve, junto con los diputados en Cortes Ceferino Díaz y María Jesús Sáinz.
También se citó una larga lista de altos cargos de la Xunta. Entre otros, el secretario xeral y la directora de Comunicación, Alfonso Cabaleiro y Mar Sánchez.
El delegado territorial de la Xunta en A Coruña, Diego Calvo, encabezaba una nutrida representación de la Administración local, con los alcaldes de Porto do Son, Pastor Rodríguez; de Ribeira, Torres Colomer; de A Baña, Andrés García; de Lalín, Xosé Crespo; de Ordes, Regos Boquete; de Boiro, Xosé Deira y otros regidores de la comarca, junto con la práctica totalidad de la corporación compostelana.