Reconocimiento al compromiso, esfuerzo y buen hacer por Galicia

El Grupo Correo Gallego ha querido distinguir el trabajo de profesionales de diversos sectores que van desde el ámbito sanitario hasta el empresarial o el artístico. En este sentido, uno de los galardonados en la gala de ayer fue el ortodoncista Juan Carlos Pérez Varela, que se mostró emocionado de haber recibido este prestigioso premio, ya que viene desde Galicia, "tierra donde yo nací, donde nacieron mis padres, donde nacieron mis abuelos, donde nacieron mis hijos y donde me encantaría que naciesen mis nietos". Asimismo, reconoció que este premio servirá para que siga esforzándose cada día "en dar la mayor calidad a mis pacientes y en demostrarle al mundo que Galicia no es solo gastronomía, paisajes y playas, sino que también podemos ser y somos referente internacional a nivel de desarrollo, tecnología e innovación".

En el marco del ámbito empresarial, ayer fue reconocido el trabajo de Luis Rodríguez Marqués, todo un referente en el sector de los destilados con la marca Ruavieja. En su discurso recordó que fue su abuelo quien fundó la primera bodega en el año 1888, y que ahora son sus hijos y nietos quienes siguen vinculados a esta actividad. "En mis más de 65 años de vida empresarial pasé por momentos muy complicados y muy difíciles. No siempre fue un camino de rosas, pero en esos momentos tan complicados tuve la suerte de contar con mi familia y con algún leal y fiel amigo, especialmente Ramón Otero Sotelo. Sin ellos no hubiera sido posible salir adelante".

Rodríguez Marqués quiso agradecer también el trabajo de la multinacional Pernord Ricard, "por el esfuerzo en la divulgación de un producto tan gallego como son los aguardientes y licores de nuestra tierra".

Para terminar, recordó cómo en el año 1964, cuando se trasladó a vivir a la capital gallega, una de las primeras cosas que hizo fue darse de alta como suscriptor de EL CORREO GALLEGO. "Llevo más de 50 años recibiendo en mi domicilio este diario y puedo decir que forma parte también de mi vida".

Otro de los representantes del mundo empresarial galardonado en la noche de ayer fue el empresario y artesano Ismael López Silva, Pepecillo, que se mostró muy agradecido por recibir el galardón. Aprovechó además para hacer una mención especial a su padre, que le enseñó el oficio de sastre desde muy pequeño y fue la primera generación de su familia dedicada a la sastrería. "Mis padres, que ya no están, seguro que se sentirían muy orgullosos". Por último agradeció el apoyo de todos sus amigos y familiares. "Sin todos vosotros esto no habría sido posible".

Ángel Viro, director de la Coral Polifónica de Ponteareas, agrupación que se encargó de poner la nota musical a la gala, también fue uno de los galardonados. Emocionado, agradeció el cariño con el que el Grupo Correo Gallego ha tratado a la coral en su larga trayectoria, y "que ha plasmado hoy con este broche de oro". "Este broche quiero incrustarlo en el corazón de todos los que son y fueron miembros de esta agrupación".

El director hizo extensivo su premio al pueblo de Ponteareas, a sus autoridades y a Luciano Doval, José Castro Álvarez y Antonio Troncoso de Castro, "tres personas claves en su exitoso desarrollo".

Por su parte, la fotoperiodista Marta Moreiras aprovechó su intervención para recordar a todos sus compañeros fotógrafos "que cada día salen a la calle para informar a la gente y sin saber, en muchas ocasiones, si su trabajo va a ser remunerado". Además, justo después de agradecer la distinción, defendió que solo una sociedad bien informada es totalmente libre.

La élite del deporte. En el prestigioso club Gallegos del Año entraron también cinco deportistas paralímipicos que comparten espíritu de sacrificio, fuerza de voluntad y resiliencia. Son la triatleta Susana Rodríguez, los baloncestistas Agustín Alejos Alonso y David Mouriz Dopico; el tenista Martín de la Puente Riobó y el nadador Chano Rodríguez Veloso.

La primera en intervenir fue Susana Rodríguez, que relató su experiencia en los juegos olímpicos de Río de Janeiro y se mostró muy ilusionada de recibir este premio por segunda vez.

La siguió Chano Veloso que quiso tener una mención especial para los que hacen posible que los paralímpicos estén hoy "al mismo nivel que los olímpicos".

En el caso del tenista, el encargado de recoger el premio fue su hermano Antón, ya que Martín estaba ayer de viaje para disputar un torneo del circuito mundial de tenis en silla en Suiza. Antón se encargó de trasladar el agradecimiento de Martín y de recordar cómo el deporte adaptado lo ayudó a que todas las dificultades personales desaparecieran. "Al final la discapacidad es solo una circunstancia de la vida, no un impedimento para poder desarrollar una vida deportiva plena e idéntica a la de cualquier otra persona".

Tampoco pudieron asistir los baloncestistas Agustín Alejos y David Mourez. Sus premios fueron recogidos, en el caso de Agustín por su madre, Divina, y por su hermano, Bruno, en el caso de David. Ambos se mostraron muy agradecidos y orgullosos.