Cada vez son más las personas que desarrollan su actividad profesional con algún dispositivo tecnológico en la mano. Los gallegos no son una excepción en esta tendencia generalizada. Así lo apunta la Enquisa de poboación activa que analiza las habilidades profesionais publicada ayer por el Instituto Galego de Estatística (IGE), con datos correspondientes al año pasado. Y es que uno de cada tres trabajadores de la comunidad pasan más de la mitad de su jornada frente a una pantalla, un reflejo de que a tecnología continúa estando cada vez más presente en todos los ámbitos de la vida.
Esta cantidad de personas que trabajan con herramientas tecnológicas, según la encuesta que analiza las tareas de las personas activas entre los 16 y los 71 años, se eleva en el caso de las mujeres, siendo cerca del 36% del total las que dedican la mayor parte de las horas que de su actividad profesional frente a un dispositivo digital. Por su parte, el porcentaje de hombres se sitúa en el 27%, lo que se traduce en casi diez puntos porcentuales por debajo.
Grandes diferencias entre hombres y mujeres
“Se observan diferencias por sexos en la distribución del tiempo dedicado a las distintas tareas”, señala el IGE en el comunidado correspondiente con este estudio. En el lado contrario de la balanza con respecto al uso de la tecnología están las labores que requieren de un esfuerzo físico. Uno de cada cuatro gallegos tienen un empleo que requiere de esta exigencia la mitad de su jornada o más. Aquí la disparidad es la contraria. Mientras que el porcentaje de hombres sube hasta el 29,1%, el de las mujeres desciende hasta el 19,9%.
“Interactuar con personas externas a la empresa o organización”, es otro de los puntos analizados que reflejan más diferencias entre géneros. Aquí, la prevalencia se encuentra de nuevo en la mujeres. El 35,6 % de ellas dedican la mitad o más de su jornada laboral a atender tareas de este tipo. El porcentaje de hombres se sitúa once puntos porcentuales por debajo.
Autonomía en el trabajo y repetición de tareas
El estudio da a conocer también el grado de autonomía que los gallegos activos consideran tener a la hora de la llevar a cabo su actividad profesional, ya sean empleados o cuenten con una compañía de su propiedad. Así, el 59,6 % de los trabajadores por cuenta propia manifestaron tener una “amplia o muy amplia” autonomía, tanto en la orden como en el contenido de las tareas que realizan. En el caso de los empleados por cuentan ajena, el porcentaje baja de manera drástica. Tan solo el 19% declaran sentir esta autonomía.
Por otro lado, la mayoría de gallegos ocupados considera que “en gran medida” realizan tareas repetitivas en su empleo principal. En concreto, el 84,8% de los encuestados considera que su trabajo cumple con esta característica. Las disparidades en este caso, se aprecían según el nivel de estudio entre los gallegos. De la población que cuenta con educación superior se siente identificada con esta afirmación el 79%. Por la contra, supera el 90% entre la población con educación secundaria de primera etapa, donde el 91% realizó tareas repetitivas con frecuencia en su empleo.