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La Xunta alerta de una estafa que están sufriendo los turistas en la playa de Las Catedrales: obligados a tomar medidas

La gran afluencia de visitantes en esta temporada estival está haciendo que muchos se aprovechen de los turistas

Un coche de la Guardia Civil

Un coche de la Guardia Civil / GUARDIA CIVIL

R. S.

El número de turistas que están llegando este verano a Galicia está batiendo todos los récords. Nuestras costas están de moda y esto está provocando que hoteles y otros alojamientos cuelguen el cartel de no hay billetes.

Este crecimiendo del turismo está obligando a limitar algunas de las zonas más reclamadas por los visitantes, como es la playa de Las Catedrales, a la que desde el pasado 1 de julio solo se puede acceder con entrada.

Así, la Xunta de Galicia limitó el acceso a 4.812 visitantes diarios para evitar que se dañe el entorno natural y creó un sistema para obtener las reserva a través de internet de forma gratuita. Sin embargo, dado el gran reclamo que tiene la playa de Las Catedrales, estas entradas a menudo se agotan rápido y los turistas se ven sin entradas pese a querer hacer la reserva con antelación.

A sabiendas de la gran demanda, algunos usuarios se hacen con estas reservas para luego revenderlas a los turistas interesados, sin saber que están cayendo en una estafa.

La Xunta, obligada a tomar medidas contra la estafa a los turistas

Para visitar la Playa de las Catedrales es aconsejable hacerlo una hora antes de la bajamar

Para visitar la Playa de las Catedrales es aconsejable hacerlo una hora antes de la bajamar / C. de Ribadeo

Dada la situación, en representación del gobierno local de Ribadeo, la concejala de turismo Marta Saiz ha querido mostrar su rechazo total a estas prácticas y recordar que el acceso a la playa es gratuito: "Recomendamos a quienes deseen visitar la playa, alojarse en los establecimientos hoteleros que se pueden encontrar en la página web. También tienen la opción de ir en taxi o en el autobús lanzadera que se desplaza según la marea".

En su momento, la Xunta ya había denunciado la existencia de páginas web que cobraban las entradas. Ahora, su 'modus operandi' ha cambiado, advirtiendo al turista de que la reserva es gratuita, pero que se cobra la gestión de la misma, para así no incurrir en un delito.

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