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¿Cómo actuaría Galicia ante una situación de riesgo por inundaciones?

La Xunta puede prever con tres días de antelación el riesgo, pero solo en la cuenca Galicia-Costa, de titularidad autonómica

Uría, Vázquez, Fernández Añón y Taboada este miércoles en las instalaciones de Meteogalicia.

Uría, Vázquez, Fernández Añón y Taboada este miércoles en las instalaciones de Meteogalicia. / Xoán Álvarez

Belén Teiga

Belén Teiga

Santiago

La DANA que ha devastado la Comunitat Valenciana y sus consecuencias han puesto a los planes de inundaciones de toda España en el punto de mira; también los sistemas de coordinación para prever y actuar antes eventos meteorológicos adversos. La cuestión es, ¿cómo actuaría el Ejecutivo gallego ante una situación de este calibre? 

Desde octubre del año 2022, Galicia cuenta con un sistema de alerta temprana de riesgos de inundaciones, el modelo Merlín, capaz de hacer predicciones a tres días vista de hasta dónde pueden llegar las inundaciones según el nivel del caudal estimado de los ríos. Esta información se traslada al 112 con 48 horas de antelación para que, en palabras de la conselleira de Medio Ambiente y Cambio Climático, Ángeles Vázquez, "sean lo más precisos posible".

Con todo, este modelo no funciona en todas las demarcaciones de la comunidad y es que la Xunta tiene las competencias de la cuenca Galicia-Costa, que abarca en torno 40% del territorio, pero no de la Confederación Hidrográfica Miño Sil y otras cuencas "residuales".

El modelo Merlín, desarrollado por Augas de Galicia en colaboración con la Universidade da Coruña, no solo se basa en la observación, sino que también es predictivo. Entre otras cuestiones, cuenta con parámetros que acumula durante 30 días y, además, va comprobando la adecuación de sus previsiones con los resultados reales para perfeccionarse. Además, se nutre de los datos de las 160 estaciones de medición de Meteogalicia, a las que suma las 50 de la Aemet.

En los diez primeros meses de este año, Augas de Galicia llevó a cabo un total de 36 informes del sistema Merlín. Se activaron 16 prealertas, si bien ninguna situación precisó ir más allá y activar el aviso de alerta. 

Sobre la emisión de alertas, el coordinador de Meteogalicia, Juan Taboada, detalló que, antes de ello, se toman como referencia ciertos niveles de los parámetros que miden y que, en caso de traspasarse, se procede a trasladar el correspondiente aviso a Protección Civil, ya sea nivel amarillo, naranja o rojo. Este último ente es el responsable tanto de movilizar los medios precisos, así como de alertar a la población, en caso de ser necesario.

Las competencias

"Galicia tiene una singularidad que no tienen muchas comunidades: tenemos nuestro propio sistema implantado, al igual que tienen País Vasco y Cataluña", incidió Vázquez. En este sentido, la titular de Medio Ambiente resaltó que este sistema proporciona "una predicción mucho más adecuada" y "detallada", aunque "nunca se descarta tampoco la información de Aemet". 

"Como comunidad, entendemos que nosotros debemos tener esas competencias", subrayó la representante de la Xunta. En esta línea, el responsable de Augas de Galicia, Roi Fernández Añón, puso de manifiesto que este modelo está "muy bien visto" y sirve "de referencia" a nivel nacional e internacional.

¿Qué habría pasado si Valencia tuviese este modelo?

Preguntado Fernández Añón sobre si el modelo gallego habría podido evitar de algún modo situaciones como la vivida en Valencia, el responsable de Augas de Galicia evitó dar una respuesta tajante. Si bien, admitió que, por lo menos, hubiese permitido jugar "con la ventaja del tiempo" que tienen los modelos predictivos.  

"Quiero pensar que sí", contestó sobre si el desastre provocado por la DANA podría haber sido de menores dimensiones.

Casi 13 millones para mejorar la resiliencia hídrica el año que viene

Así las cosas, la titular de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, anunció que Augas de Galicia reservará el próximo año una partida de 12,9 millones de euros con el propósito de incrementar la resiliencia hídrica - capacidad de adaptarse, resistir y recuperarse ante una crisis de calidad o disponibilidad de agua - de la comunidad frente al calentamiento global.

De esta cantidad, alrededor de 2,7 millones se utilizarán a mejorar el mapeo de riesgo climático. En este caso concreto, Vázquez trasladó que el objetivo es identificar aquellas zonas que son climáticamente más vulnerables para avanzar en la planificación de episodios de sequía o inundaciones.

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