Menos empleo y peor pagado: la doble brecha de las mujeres con discapacidad

La plena inclusión de las personas con discapacidad en el mercado de trabajo es uno de los retos pendientes de la sociedad. Pero son las mujeres las que en mayor medida padecen una discriminación que dificulta su acceso al empleo, incluso si es protegido. Así se constata en el informe Mujer, empleo y discapacidad, presentado ayer en Cambre, el primero sobre la situación laboral de las mujeres con discapacidad en los centros especiales de empleo y que sus autores consideran «una muestra significativa para extrapolar resultados».

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El estudio, promovido por la Asociación Empresarial Gallega de Centros Especiales de Empleo de Iniciativa Social (Cegasal), ofrece una radiografía detallada de la realidad laboral existente en estas entidades sin ánimo de lucro. Y lo cierto es que las conclusiones van en la línea de lo que apunta el propio Instituto Nacional de Estadística (INE), al situar en el 26,9% la tasa de empleo para las mujeres con discapacidad, frente al 62,5% de las que no presentan discapacidad alguna.

El estudio recomienda diseñar programas de formación e implantar planes de igualdad

Cabe destacar que los centros especiales de empleo de iniciativa social (CCEIs) están concebidos específicamente para las personas con discapacidad, por lo que las funciones de su personal se adaptan a su situación y necesidades. Pero también en ellos se evidencia que existe una «brecha» en el acceso al empleo.

Según el informe, las mujeres con discapacidad representan apenas un 21% de las personas que trabajan en los CCEIs, frente al 65% de hombres con discapacidad. La temporalidad sigue siendo otra de las asignaturas pendientes, con un 36% de mujeres contratadas a tiempo parcial. No obstante, el estudio subraya que las recientes reformas legislativas sí se han traducido en un «ligero avance» en la estabilidad laboral, reduciendo hasta los 3 puntos porcentuales la diferencia entre los contratos indefinidos de hombres y mujeres (72% frente a 69%).

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Solo un tercio de los centros analizados en el informe está dirigido por una mujer y la brecha salarial se sitúa en el 10,3%, con un salario medio anual de 20.193 euros para mujeres con discapacidad (frente a 22.520 € para hombres).

Más transporte público y menos sobreprotección

Entre las «barreras» que complican el acceso de las mujeres con discapacidad al mercado laboral, el informe destaca la dificultad que tienen muchas de ellas para acceder al transporte público, así como la falta de formación y la brecha digital existente en la actualidad. Pero también llama la atención sobre la «sobreprotección» y los modelos familiares tradicionales «que limitan la inserción laboral» de este colectivo.

Un 36% de las mujeres con discapacidad tiene contrato parcial en los centros de empleo

Así las cosas, ¿qué se puede hacer en los centros de empleo para facilitar la inclusión efectiva de las mujeres con discapacidad? El estudio propone elaborar e implantar planes de igualdad en los centros de empleo sin ánimo de lucro —de hecho, el 47% de los analizados carece de este protocolo—. También se recomienda diseñar programas de formación presencial y fomentar medidas de conciliación que se adapten a las «necesidades reales» de las trabajadoras. Además, el informe propone ampliar las medidas de prevención de la violencia de género para crear entornos seguros.

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En la presentación del informe, el presidente de Cegasal, Mino Martínez, subrayó que es un «deber social» construir un futuro «más inclusivo y justo» y pidió trabajar «conjuntamente» sobre las barreras específicas que sufren las mujeres con discapacidad para poder superarlas.

En parecidos términos, la vicepresidenta de la asociación, Mayca Vidal, puso el acento en la «relevancia» del estudio «pionero» presentado ayer para «visibilizar desafíos y oportunidades» que permitan superar las barreras a las que se enfrentan a diario las mujeres con discapacidad.