Allariz sería el único concello en riesgo muy alto con el nuevo ‘semáforo covid’
Salud Pública expuso este martes a las comunidades el nuevo sistema de medición del peligro más laxo y flexible // Feijóo lo valoró positivamente // Seguirá en estudio hasta la reunión del viernes
Convivir con el virus. Ese es el objetivo que el Gobierno, tanto autonómico como estatal, tiene en mente de cara a los próximos meses. La situación en estos momentos, aunque parece que la sexta ola que asola a Europa está llegando a España y elevando el número de casos activos, no es comparable a la de embestidas anteriores, pues los hospitales mantienen a rajatabla la presión asistencial y la mayor parte de la población se encuentra ya inmunizada: más del 85 % en Galicia.
Llegados a este punto, pues, no parece lógico mantener el mismo baremo para imponer restricciones o determinar la situación de un territorio que antes de la vacunación. Por ello., Sanidad presentó en la Comisión de Salud Pública de este martes un nuevo documento que modifica los riesgos de transmisión actuales, haciéndolos más laxos y flexibles, y que será objeto de estudio por las comunidades en los próximos días. Según informó el Ministerio, en la reunión de ayer “se han recogido impresiones y propuestas” de los representantes autónomicos”, pero “se seguirá trabajando” en él hasta el viernes, cuando prevén otra reunión.
Con todo, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo ya ha dado su impresión sobre la propuesta: “La vacuna ha disminuido los ingresos y por tanto me parece que hay que subir la incidencia de covid, porque no produce los mismos ingresos que sin vacuna”. De este modo, “posibilitar mayor número de infecciones sin necesidad de extremar precauciones me parece razonable”.
Así, en caso de aprobarse el nuevo documento, el riesgo bajo llegaría hasta los 100 casos de incidencia a 14 días, cuando hasta ahora estaba comprendido de 0 a 50. Los municipios de cero a cincuenta de IA a dos semanas vista se consideraría que tienen riesgo controlado. En esta situación se encontraría la mayor parte del territorio gallego, 222 concellos, que hasta el momento eran considerados de riesgo bajo.
Precisamente, en el nuevo riesgo bajo habría 42 ayuntamientos: Boqueixón (71), Vedra (60), Arzúa (50), A Baña (87), Tordoia (91), O Pino (65) y Valga (51) serían los pertenecientes al área sanitaria de Santiago. Ahora están en el nivel medio.
A ellos se sumarían, en las demás áreas y en el mismo nivel: Guitiriz (55), Friol (80), Palas de Rei (89), Outeiro de Rei (58), Lugo (72), Castro de Rei (59), O Corgo (86), Catoira (90), Vilagarcía (56), A Illa (61), Ribadumia (59), Cerdedo (53), Pontevedra (51), Vilaboa (57), Vigo (59), Cariño (78), Ortigueira (53), Valdoviño (77), Ferrol (56), Ares (52), Neda (59), Cabanas (91), Cambre (77), Culleredo (56), A Coruña (59), Oza (59), Malpica de Bergantiños (56), Ponteceso (55), Cabana de Bergantiños (71), Oia (98), Tui (96), As Neves (78), Ribadavia (60), Celanova (53) y San Cibrao (56).
Seguidamente, el nivel medio se vería relajado hasta comprender entre 100 y 300 casos. Estarían incluidos en él un total de 41 municipios: Vilar de Barrio (230), Xunqueira de Ambia (218), Sandiás (249), Xinzo (103), Trasmirás (233), Cualedro (179), Bande (196), Muiños (200), Oimbra (175), Nogueira de Ramuín (150), Ourense (160), Barbadás (127), Toén (127), Cartelle (114), Viana (104), Carballido (137), San Cristovo de Cea (140), Maside (111), Carballeda de Avia (194), Avión (167), A Lama (123), Boborás (131), Campo Lameiro (165), Baleira (242), Pol (182), Meira (174), Dumbría (101), Cee (133), Paderne (125), Oleiros (147), Fene (131), O Valadouro (151), Barreiros (102) y O Vicedo (179), A Mezquita (293), Cenlle (268), Folgoso do Courel (293) y As Nogais (278). Y en el área de Santiago: Agolada (128), Santiso (189) y Frades (128).
Y el nivel alto pasaría a estar comprendido entre los 300 y los 500. En Galicia habría, así, seis ayuntamientos en esta situación, cinco de ellos pertenecientes al área de Ourense, la que más está sufriendo esta embestida: Montederramo (422), Vilar de Santos (366), Porqueira (368), Lobeira (376), Petín (348) y Forcarei (325). El en el área de Pontevedra. Y ya en nivel muy alto se encontraría únicamente un municipio, superando los 500 casos por cada cien mil habitantes: Allariz, con 566.
LOS HOSPITALIZADOS SERÁN DETERMINANTES. Con todo, el nuevo documento no solo plantearía cambios por incidencia, sino una serie de requisitos en la presión asistencial del área para determinar los niveles. Por ejemplo, se consideraría que un territorio está en nivel bajo si depende de un área con incidencia en uci entre 25 y 50 casos; en medio, entre 50 y 150; en alto, entre 150 y 250; y en muy alto, con más de 250 de incidencia. Estos mismos valores se trasladan a los hospitalizados en planta. Así, retomando el ejemplo de Allariz, este concello, además de tener una incidencia muy alta de casos (566), se encuentra en el área de Ourense, con 11 ingresados en planta y uno en uci (incidencias de situación aún controlada, por debajo de 25).
··· La mujer de 58 años que falleció el pasado viernes 12 de noviembre, una de las víctimas más jóvenes de la pandemia, en su domicilio, perteneciente al área sanitaria de Ferrol, no estaba vacunada contra el coronavirus. No padecía de patologías previas. Sus restos mortales fueron velados en el Tanatorio crematorio Albia Ferrol y enterrados en la tarde del pasado sábado, 13 de noviembre, en el cementerio vecinal de San Manuel de Laraxe, en Cabanas.
··· Tal y como indicó el presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, la pasada semana, uno de cada cuatro ingresados covid (el 25 %), no está vacunado. Así, animó al 6 % de la población diana que todavía no ha acudido a la vacunación a inmunizarse “para protegerse ellos y proteger a los demás”.
En Santiago el número de ingresados se mantiene bajo control, situado en tres. Según el doctor Antela, “el efecto de la vacunación se ve en que no se están incrementando tanto las hospitalizaciones como se preveía”. Además, explica que lo que ahora se está viendo en Europa es “una ola de no vacunados”, de manera que España y, más en concreto, Galicia, por tener un amplio porcentaje de la población vacunada (más del 85 %), “debería estar más protegida”. Por ello, el sanitario se muestra “un poquito optimista”, pero “con cierta cautela”, porque llegados a este punto “el virus no deja de sorprendernos”. Lo que suceda en los próximos meses, en su opinión, también “dependerá de las medidas que se tomen”, porque “si no se hace nada, con las Navidades y el puente a la vuelta de la esquina”, cualquier cosa podría pasar.
En el Hospital de Montecelo ya se está reactivando “toda la actividad quirúrgica”, por lo que, en ese sentido, “hay muchísimo trabajo”. A nivel de pacientes ingresados por covid, “si hasta hace unos días no había ninguno, ahora hay uno, y la tendencia se ve que puede ir aumentando”. Por ello, aunque la situación en Pontevedra es de calma, por el momento, la doctora Varela asegura que “estamos muy pendientes de lo que sucede en otras áreas”, para comprender cómo puede ser la evolución del virus en las próximas semanas. “Lo decimos siempre, tenemos que ser prudentes, porque hace dos semana apenas había pacientes ingresados y ahora ya van 46 en planta y diez en críticos”, recuerda. Aunque evidencia que “la vacuna nos está protegiendo”. Finalmente, insiste en la precaución de cara a las fiestas.
“Es imposible prever con tanta antelación si el comportamiento de esta nueva oleada será similar al de otras”, asegura el profesor Michinel, cuya página web y la de su equipo de la UVigo muestran que Galicia podría superar a final de semana los 1.800 casos activos. Así las cosas, el experto vaticina que esta ola “podría parecerse a la de los meses de abril-mayo-junio pasados”, según reflejan los datos, una ola “muy leve”. Pero, no descarta que “la situación pueda cambiar y acelerarse en los próximos días”. Con todo, si siguiésemos en esta línea, “sería de esperar que las urgencias no llegaran a saturarse debido al efecto de la vacuna”. Michinel se muestra, además, partidario de relajar los niveles de riesgo, y asegura que, “de cómo pasemos el invierno, dependerá si podremos pasar la página de la pandemia”.