Galicia recauda 53 millones del sector del juego en un año

Las actividades relacionadas con el sector del juego público y privado representan el 0,9% del PIB español, una cantidad nada desdeñable que indica el negocio que representa y crea y los impuestos que paga. Tan solo para hacerse una idea, en compras de billetes de lotería y cupones de la ONCE, fichas en casinos, cartones en bingos, apuestas, etc., se movieron en España durante el año 2017 cerca de 42.000 millones. El juego real -la diferencia entre las cantidades jugadas menos los premios- fue de 9.408 millones. Además, en cuanto a los impuestos aplicados al juego en todo el año 2017, últimos datos publicados, fueron algo más de 1.657 millones de euros.

En el caso de Galicia esta recaudación real, es decir, de impuestos efectivamente cobrados, ascendió a 53 millones, según indica el Anuario del juego de España 2018, publicado por la empresa Codere -compañía multinacional española perteneciente al sector del juego privado, con presencia en ocho países de Europa y América- en colaboración con la Universidad Carlos III.

Los números referidos a la comunidad gallega indican que la mayoría de estos impuestos proceden de las máquinas (40 millones), seguido de los bingos (algo más de 9 millones), las apuestas deportivas (tres millones), los casinos (algo más de medio millón) y, finalmente, los prácticamente residuales 172.230 euros recaudados de las rifas, tómbolas y combinaciones aleatorias. De entre todos estos conceptos en el de las apuestas deportivas se observa un crecimiento importante con respecto a 2013, cuando se recaudaron 388.000 euros, aunque los tres millones de 2017 indican una bajada de este negocio en un año ya que en 2016 se recaudaron 5,4 millones en la comunidad.

Estos 53 millones de 2017 en impuestos en Galicia representan un descenso con respecto al año anterior (55 millones), ejercicio en que habían ascendido de forma considerable desde los casi cincuenta de 2015. A nivel nacional, la mayor alza se dio de 2013 a 2014, al pasar de 1.532 a 1.672 millones. En total, las comunidades autónomas recaudaron en 2017 1.093 millones, de los que 760 corresponden a las máquinas (incluidas las de hostelería). Además, en todo el territorio nacional los casinos pagaron 68 millones; los bingos, casi 230; rifas y tómbolas, 3,5, y las apuestas deportivas, 31,6 millones de euros a las comunidades, "básicamente por las apuestas presenciales", indican los autores del informe, que, además, indican que es poco conocido que "las empresas de operación de máquinas en hostelería, salones de juego, bingo y casinos generan más de 45.000 empleos directos, y las dos grandes empresas públicas (SELAE -Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado- y ONCE) sostienen casi 40.000".

LEI DO XOGO DE GALICIA Durante los últimos meses, la población gallega vio alarmada como crecían en las calles de sus localidades los establecimientos dedicados a las apuestas deportivas y al juego. Diversos colectivos, entre ellos asociaciones de vecinos y de padres y madres de alumnos, demandaron el control de estos negocios, muchos de ellos en los barrios más vulnerables de las ciudades, próximos a colegios o a parques infantiles y demasiado cerca unos de otros.

La Xunta está en pleno proceso de aprobación de una nueva Lei do Xogo, que actualizará la legislación vigente desde 1985. El anteproyecto de ley ya pasó por la fase de información pública, momento en el que se presentaron 12 sugerencias. Además, en el mes de mayo, el Consello de Goberno dio luz verde a un decreto para limitar el número de salones de juego y tiendas de apuestas en la comunidad. Esta moratoria indica que el límite máximo será de 118 salones de juego (97 ya en funcionamiento y 21 en fase de tramitación de expediente) y 41 casas de apuestas, en este caso todas ya efectivas.

Sin embargo, el decreto es temporal, con una duración máxima de 9 meses a contar desde la aprobación del acuerdo del Consello del día 16 de mayo, a la espera de la nueva Lei do Xogo. Si al vencer el plazo aún no es efectiva la norma, el acuerdo prevé que se haga una nueva evaluación de la oferta para determinar la necesidad de un nuevo acuerdo. Consultado el Ejecutivo gallego sobre sus previsiones de plazo para la luz verde de la ley, indica que "non podemos precisar". El motivo es que "falta aínda a emisión de informes perceptivos e enviar a Comisión Europea, que ten tres meses para emitir o seu informe".

Algunas de las cuestiones que introducirá esta ley gallega será la obligación de todos los establecimientos de vetar al entrada de menores de edad, así como de las personas que figuren voluntariamente en el registro de prohibidos, realizando controles de entrada e identificación; el cambio de método para medir la distancia, que será de 150 metros colegios y de 300 entre locales de las mismas características.

MÁS DE 3.100 SALONES DE JUEGO