Guerra al fraude en la hostelería, horas extras, falsos autónomos y desigualdad

Sin tregua en la lucha contra el fraude. La Xunta apretará este año el acelerador para combatir las prácticas ilegales con un plan de inspección laboral que ayer aprobó el Consello y dio a conocer el vicepresidente Alfonso Rueda en ausencia del presidente Alberto Núñez Feijóo, que se encuentra de viaje oficial en Estados Unidos.

La medida, según resaltó Rueda, prestará especial atención al sector de la hostelería, al control de las horas extras, a los falsos autónomos y a la igualdad entre hombres y mujeres.

Con este plan específico, que la Xunta considera ambicioso y reforzado, el Gobierno gallego pretende utilizar todos los medios para detectar y corregir las prácticas irregulares en esta materia con el fin de proteger a los trabajadores y también la calidad en el empleo.

Dentro de esta iniciativa habrá un mínimo de 34.800 actuaciones, un 3% más que en 2018. En el pasado ejercicio, la inspección laboral permitió en Galicia transformar más de 7.900 contratos en indefinidos, que aflorasen cerca de 5.200 empleos sumergidos y que se detectasen más de 1.700 casos de falsos autónomos. El último informe Ranstad, que recoge datos del año 2077 -el próximo sobre 2018 se conocerá previsiblemente en verano-, refleja que en Galicia los trabajadores realizaron siete millones de horas extras. Es más, apunta que en la comunidad autónoma crecieron un 30,2%; es decir, casi cinco veces más que la media de España.

Según el Instituto Nacional de Estadística, en base a datos de la Encuesta de Población Activa, el número de horas ilegales trabajadas en Galicia por superar el trabajador el máximo de 42 semanales asciende a 585.611.

En todo caso, la lucha de la Xunta no se ciñe solo a ese plan, sino que la Administración autonómica desarrolla otro específico de lucha contra el fraude en las empresas que permitió en los nueve primeros meses de 2018 llevar a cabo más de 3,600 regularizaciones. Los sectores en los que se produjo el mayor número de regularizaciones fueron el del comercio, la industria manufacturera, la hostelería y la educación. Esa hoja de ruta específica permitió que entre enero y septiembre del año pasado se transformaran otros 3.327 contratos temporales en indefinidos.

En la reunión semanal del gobierno gallego también recibió luz verde la convocatoria de 150 becas de excelencia par jóvenes gallegos que viven fuera y puedan así completar su formación especializada en la comunidad gallega.

Alfonso Rueda indicó que debido a la gran acogida que tuvieron estas becas en los años anteriores, la Xunta decidió dar continuidad a la iniciativa incrementando además en un 50 % tanto el número de plazas como la dotación económica, que supera en esta ocasión los 1,1 millones de euros.

Según detalló el vicepresidente, la convocatoria está enfocada a chicos y chicas que viven en el exterior, completen aquí sus estudios y de esta manera puedan quedar a trabajar en Galicia fijando su residencia en territorio gallego. Para acceder a ellas los estudiantes tienen que tener un currículum brillante y cursar un máster en una universidad gallega en el que deben de estar preinscritos. Además, los estudios, precisó Rueda, habrán de estar ligados a áreas de actividad que tengan salida profesional en Galicia. Las ayudas están destinadas a cubrir gastos de matrícula, alojamiento y manutención en Galicia y van desde los 7.000 euros hasta los 11.475, según el número de créditos con los que cuente el curso.

En las anteriores convocatorias, la Xunta atendió peticiones de Venezuela (casi un tercio), Argentina, Brasil, Uruguay, Reino Unido, México, Chile, Panamá, Cuba y Bolivia, entre otros muchos países.

Educación. El tercer bloque potente que recibió luz verde en el Consello fue la convocatoria de 2.064 plazas en 35 especialidades en la mayor oferta pública de empleo docente de la última década que estará resuelta antes de agosto.

"Seguimos apostando pola educación pública porque significa apostar polo futuro do país. Por iso un goberno como este, que está pensando xa na construción da Galicia da vindeira década, non pode desatender o reforzo da nosa educación pública", indicó el número dos de la Xunta.

"Reforzámola con novas materias adecuadas ás necesidades sociais, con máis tecnoloxía e mellores equipamentos, con máis idiomas en todos os niveis, e por suposto, apuntalando os alicerces da excelencia educativa, que non sos outros que os profesores", abundó Alfonso Rueda.

Con esta oferta, unida al mayor concurso de traslados de la historia, según sus propias palabras, se logra la mayor estabilidad de docentes "alcanzada nunca". En la actualidad la tasa de interinidad en la educación pública está en el entorno del 9% la más baja de España. Tras la OPE se prevé reducirla al 7 %.