El comercio gallego ve muy negro el Black Friday: “No podemos asumirlo”

Para millones de consumidores en todo el mundo el Viernes Negro ("Black Friday") es un día de color de rosa por sus tentadores descuentos –que ahora en España ya se extienden durante varios días– en una gran variedad de productos. Sin embargo, el pequeño comercio gallego no lo ve tan claro.

Así lo constata el presidente de la Federación Galega de Comercio, José María Seijas, quien considera que esta jornada favorece más a las grandes multinacionales que a los pequeños y medianos negocios. Lamenta que “anticipa las Navidades” y conlleva “unos descuentos durante varios días que el pequeño y el mediano comercio no pueden asumir”, debido a la subida de costes como los energéticos y los combustibles. “Nos va a llevar a pasarlo con muchas dificultades, incluso al consumidor”, indica, mientras se queja de que es una moda “importada de Estados Unidos” y que, si bien “antes era un día”, ahora dura “una semana o más con descuentos y muchas promociones”.

Además, insiste Seijas en que el ‘Black Friday’ provoca “desgaste” en los negocios más pequeños “de cara a las Navidades”, porque “hay mucha gente” que aprovecha este día para hacer las compras para esas fechas. Antes, recuerda, las Navidades “eran de las fechas de mayores ventas del año y solucionaba el cierre del año” al comercio.

En este contexto, reitera la necesidad de que se vuelva a regular “por ley” los períodos de rebajas y descuentos, una medida que “desaparecía” con la modificación de la normativa en el año 2012. “Esto es responsabilidad del gobierno central, en Madrid, y hemos planteado ya en varias ocasiones esto. Se nos ha prometido que se iba a retomar, pero seguimos esperando”, protesta finalmente.

Cambio de dinámica. Lo cierto, como señala Seijas, es que los carteles con rebajas de este Viernes Negro están pegados en los escaparates casi desde el pasado lunes y la insistente publicidad seguirá hasta el domingo. De acuerdo con TC Group Solutions, al auge de la compra electrónica se le suma el de la mayor duración del "Black Friday" adoptado también por las tiendas físicas y asegura que “la dinámica ya no es la misma y las compras quedan repartidas a lo largo del mes”. Hay, pues, más tiempo para que el consumidor decida su compra, pero este año los descuentos serán “menos abultados” que en las últimas ediciones debido a los repuntes de los precios y a la escasez de materias primas a nivel global, como apuntan los expertos de Esade.

Además, este año las compras de Navidad se anticiparán todavía más, ante el temor de la escasez en los escaparates de algunos productos y el retraso en las entregas del comercio electrónico por las dificultades de la logística internacional. También la mejor situación sanitaria influyó en el ánimo de las familias para lanzarse a las compras.

sólo un 16 % gastará más. Habrá, por tanto, más consumo que en 2020 pero con un gasto similar, según una de las previsiones recogidas en diversos estudios de mercado para el "Black Friday". La aplicación financiera Plazo indica que un 67,6 % de los consumidores españoles tiene intención de comprar en esta jornada, algo más que el año pasado, con el 45 % de ellos con una previsión de desembolso igual al de 2020 y mayor para un 16 %, con un gasto medio por persona de entre 50 y 250 euros.

La encuesta de la OCU ofrece datos parecidos al señalar que en el "Black Friday" el gasto medio será de 208 euros, lo que supone 41 euros más que en la misma fecha de descuentos del año pasado. Una horquilla por la que transita también un informe de Webloyalty y Google, que pronostica que cada consumidor se dejará este día entre 180 euros y 210 euros, un 12 % y un 20 % más, respectivamente, que el año anterior.