Feijóo avisa al Gobierno de que su política fiscal y laboral “es un error”
Señala a la colaboración público-privada como herramienta básica para encarar la recuperación // Pide que se aprovechen los fondos europeos de forma eficiente
La política fiscal y laboral del Gobierno no convence a Alberto Núñez Feijóo, que advirtió de que es un “error” e instó a Pedro Sánchez y su equipo a aprovechar los fondos de recuperación para reducir la deuda pública y no aumentarla.
En el VII Encuentro para Directivos Líderes 100 Consejos Santander 2021, contrastó estas políticas con las de la Xunta, que sabe “lo que ayuda el rigor en la gestión y la estabilidad institucional” y que la colaboración público-privada y escuchar a los empresarios es “imprescindible”. Se refirió de este modo a los 140.000 millones de los que dispondrá España por los programas de la UE, con los que cree que no se debería seguir aumentado la deuda estatal sino aprovecharlos para actuar de manera “eficiente” y “contenerla”.
Ante un foro de empresarios, Feijóo aconsejó que “creer en las ideas y las soluciones razonadas y en las propuestas siempre fue mejor que creer en utopías y golpes fortuitos de destino”, después de valorar las medidas previstas por la Xunta en los presupuestos para 2022. Unas medidas entre las que destacó la bajada de impuestos, la contención de la deuda y el fomento de la inversión e insistió en varias ocasiones en la importancia de la colaboración público-privada, no solo para proyectos que optan a los Next Generation, sino para afrontar la recuperación.
Aprovechó, además, para volver a reclamar a Moncloa la concurrencia competitiva en el reparto de recursos de la UE porque la Xunta quiere “relanzar la industria gallega utilizando los fondos europeos” con proyectos como un polo para la transformación de Galicia, que incluye una fábrica de fibras textiles a partir de la madera.
Esos proyectos no tienen “nada que ver con la política y los partidos”, aseguró el de Os Peares, sino que son “mayoritariamente” de las empresas y la Xunta los ha “supervisado y presentado”, dijo.
En la jornada en la que la comarca de A Mariña desarrolla una jornada de huelga general, también criticó la política medioambiental y energética del Gobierno central, al que advirtió que transición “es aquello que se planifica de forma adecuada y no se anticipa ni se retrasa”.
Feijóo inició su intervención con un mensaje contra la soberbia, que es “uno de los peores asesores posibles” y el “mesianismo” que “huye del presente” porque se centra “más en desprestigiar lo conseguido que en ofrecer soluciones” y prefiere recetas de futuro “para no tener que rendir cuentas de inmediato”, ha espetado. También alertó a los empresarios contra los “proyectos políticos salvadores” que confunden sus deseos con los del pueblo y creen que la sociedad va a ser “rescatada por sus ideas”.
Ante estas políticas “no hay que resignarse”, afirmó, porque existe “la buena política que olvida las quimeras y pone esfuerzo en recoger lo mejor de la sociedad” y una “buena economía que no cree tener una varita mágica” para solucionar los problemas.
··· En la presentación del encuentro también participó el vicepresidente primero de la Xunta, Alfonso Rueda, que destacó que o turismo está llamado a ser un de los motores da recuperación de Galicia, aprovechando la celebración del Xacobeo 21-22. Así, resaltó que la reactivación del turismo en los últimos meses avala el trabajo llevado a cabo durante la pandemia para apoyar al sector con más de 120 millones en este año y con medidas encaminadas a reforzar el mensaje de Galicia como destino seguro, de calidad y sostenible. Recordó que en este verano la comunidad lideró la recuperación turística, con 25 puntos por encima de la media respecto a las cifras prepandemia de 2019. Además, avanzó que con el objetivo de continuar atrayendo en 2022 a turistas y peregrinos, el Gobierno gallego pondrá en marcha el próximo año el Plan Camiña para seguir apoyando al tejido turístico e invertirá 85,5 millones en la celebración de este Año Santo doble.
Santiago. Diez ponentes, a diez consejos por cabeza, cien mensajes. Antes del titular de la Xunta, nueve fueron los partícipes, empezando por Juan Luis Castro, director ejecutivo de Castrosúa, que detalló que la empresa afrontó la crisis de 2008 por la vía de la “resistencia”, y “sufrimos”; y la actual por la, y “aprendemos”. Alianzas, internalización e innovación son las claves del avance de la carrecera compostelana.
Tomó el relevo Carlos Martinez Fontana, CEO de Einsa Sourcing, quien argumentó que “ante la necesidad hay que reinventarse”, pero recordando que “tenéis la responsabilidad de devolver a la sociedad todo lo que la sociedad os ha dado solo por el hecho de estar aquí”.
En el primer bloque de la jornada celebrada en el Palacio de Congresos, Argimiro Fernández, presidente de Grupo GSI, apuntaba que “el peor enemigo del empresario es la arrogancia”, al tiempo que alegaba que “los miedos tienen que ser nuestro enemigo, no nuestro aliado”.
Llegaron entonces las conversaciones, con el periodista Terio Carrera departiendo primero con Lina Solla, directora general de Mariscos Linamar, quien detalló su experiencia profesional y vital, que van de la mano de su “pasión por su sueño”, plasmado en una empresa donde “saber delegar es fundamental”. Le siguió el diálogo con Dora Casal, directora ejecutiva de Roberto Verino, para introducir los consejos que genera una actividad fundamental para Galicia como el textil-moda.
Tras la pausa café, donde los contactos entre directivos son fundamentales, Marián Mouriño, la CEO de Grupo Corporativo GES, apuntaba en una nueva conversación que “ahora es la oportunidad de la mujer en puestos directivos y hay que aprovecharla”.
En la siguiente, Andrés Fernández, primer ejecutivo de Grupo Zendal, apuntaba que “el equipo al completo es lo que hace funcionar a las empresas; todos somos muy importantes”, destacó.
Los últimos partícipes fueron Ángel Rivera, director general de Banca Comercial en Banco Santander, que recetó un “conoce tu negocio y piensa en ti como un cliente”; y Enrique García, de Grupo Profand, instó a marcarse objetivos “y medir su grado de cumplimiento”. José Calviño