Feijóo reprueba la transición energética abrupta que daña la comarca de A Mariña

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, criticó este sábado en Viveiro (Lugo), un proceso de transición ecológica que tachó de “abrupta y no planificada”, que elimina puestos de trabajo en la comarca de A Mariña, cuando debería ser “justa”, “lo que se prometió a la Unión Europea”.

Núñez Feijóo participó junto a la conselleira do Mar, Rosa Quintana, en el acto de homenaje al servicio de Gardacostas de Galicia y en la clausura de las XXV Xornadas Técnicas de Difusión do Sector Pesqueiro de Celeiro.

Allí, el titular de la Xunta reivindicó la importancia de abrazar los orígenes para avanzar; “adaptarse sin rechazar el pasado”. Algo, señaló, que no sólo aplica al sector pesquero, sino también a todas las facetas de la vida, “también en política”.

“Debemos avanzar aprovechando los símbolos, lo que otros han hecho antes”, aseguró. Una idea que ejemplificó con la propia Transición, “totalmente contraria al rupturismo” o con el 40 aniversario del autogobierno gallego, “que se ha mantenido pese a las dificultades y a las crisis”.

“Somos un país unido, pese a todo, y ese es uno de los grandes activos de Galicia”, dijo.

En la línea de trabajar “unidos”, Feijóo se refirió al proceso de transición energética y su impacto sobre la comarca de A Mariña. Así, defendió una transición “justa”, “que debería ser lo contrario a la ruptura y que no debería poner en riesgo los puestos de trabajo de las familias”.

El presidente señaló la “paradoja” que ahora mismo atraviesa España: “el primer país en cerrar centrales térmicas y el primero en volver a abrir una (la de As Pontes)”.

A este respecto, censuró la intención del Gobierno de cerrar las 14 centrales “simultáneamente”, algo que no es “rentable” desmantelar si no hay otras alternativas.

Es por eso que calificó el proceso de “abrupto y no planificado”. “Algo no funciona, algo no se entiende”, apuntó, y de forma “notoria” con Alcoa. “No compartimos la decisión de Vestas ni de Alcoa, ni la inacción del Ministerio de Industria”, afirmó.

“Seguiremos llamando a todas las puertas. No estamos de acuerdo con el cierre de Alcoa, como tampoco lo estábamos con el de Ence”, abundó Feijóo, que recordó que han conseguido demostrar “que el ERE de Alcoa era ilegal”, y trabajan “para hacer lo mismo” con el de Vestas.

“No podemos resignarnos. No podemos aceptar el cierre de Alcoa ni de ninguna decisión en relación a Vestas que sea una deslocalización por falta de interés para que esta compañía permanezca en España”, afirmó.

Volviendo a la pesca, el titular del Ejecutivo gallego apostó por un sector sostenible medioambiental, económica y socialmente; “un objetivo de Galicia con Bruselas”. Además, destacó el valor del sector lucense, con 1.400 tripulantes y una facturación de más de 400 millones.

Feijóo además recordó las inversiones realizadas por el Gobierno autonómico en este sector, de más de 80 millones de euros. También en el saneamiento de las rías, con más de 20 millones de euros destinados a Viveiro y Foz.

A estas se suman, el hospital de A Mariña y otras infraestructuras como la vía de alta prestación o la autovía del cantábrico, ya con presupuesto efectivo para 2022.

En el acto se reconoció el trabajo desarrollado por el Servicio de Gardacostas de Galicia, que cumple 31 años y que ha salvado la vida de 1.800 personas. El servicio hace frente a la contaminación marina, al furtivismo o a la venta de productos por fuera de las vías legales, con el objetivo además de “preservar la salud de los consumidores”.