Galicia avanza en la gestión y revalorización de biorresiduos

EL Gobierno gallego diseñó una red de infraestructuras que facilitarán que alrededor de dos millones de gallegos que residen en 280 ayuntamientos cuenten con un servicio de valorización de la materia orgánica a menos de 50 kilómetros de su casa.

Esta red está formada por las 4 plantas de biorresiduos que está construyendo la Xunta y 13 más de transferencia, que se construirán, modernizarán y actualizarán para garantizar este servicio, tal y como aseguró este viernes la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, en una visita a la nueva planta de A Lama, cuyas obras están recién licitadas, por 1,2 millones de euros

Esta nueva planta de transferencia de A Lama, sustituirá y mejorará la microplanta que lleva años operando en este ayuntamiento de la provincia de Pontevedra. Vázquez Mejuto, acompañada por el presidente de Sogama, Javier Domínguez Lino, visitó la parcela donde se ubicará esta nueva instalación de transferencia.

La titular de Medio Ambiente, además, indicó que el Ejecutivo autonómico movilizó una partida por un total de 52 millones para mejorar la gestión de los biorresiduos en Galicia, continuando, de esta forma, con la reducción de las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.

35 millones para cuatro nuevas plantas Un tanto por ciento importante de los 52 millones, 35 de ellos, estará destinado a aumentar la operatividad de esta red. Más concretamente para la construcción de las cuatro nuevas plantas de biorresiduos que se localizarán en los ayuntamientos de Cerceda, ya operativa, Vilanova de Arousa, Cervo y Verín.

En su conjunto podrán procesar 46.200 toneladas anuales de residuos orgánicos y material estructurante, obteniendo un máximo de 13.000 toneladas de compost de calidad, tal y como indica Medio Ambiente en una nota de prensa, en la que recuerda que estas son “unas instalaciones que se complementarán con otras de estas características, tanto públicas cómo privadas, actuales y futuras, para el tratamiento de este tipo de desechos”.

Además de las cuatro nuevas plantas, al mismo tiempo, también se mejorarán las plantas de transferencia, con la instalaciones de una tolva en 7 plantas. Las localizadas en los ayuntamientos de Chantada, Sarria, Vigo, Silleda, A Rúa, Narón y O Porriño. En el caso de la planta de transferencia de Cee –tal y como avanzó Vázquez Mejuto– esta se ubicará en el polígono industrial, donde se construirá una nueva planta.

En esta nueva red de gestión y revalorización de biorresiduos, también se apuesta por la conversión de cinco microplantas en plantas de transferencia. La conselleira explicó en su intervención que, además de la de A Lama, en el caso de las de los coencellos de Curtis y Ponteceso, estas se ampliarán en la misma ubicación, mientras que para las de A Cañiza y Riotorto se está estudiando los posibles nuevos emplazamientos para su construcción.

Para 2023, contenedor orgánico marrón Así mismo, Vázquez recordó qure la Unión Europea fijó, para finales de 2023, el reto de tener implantada la recogida selectiva de la materia orgánica a través del quinto contenedor, el de color marrón. Con el objetivo de ayudar a los entes locales en esta responsabilidad municipal, la Xunta impulsó distintos proyectos para cumplir con este objetivo. La planta de A Lama ayudará, con su parcela de casi 2.300 m2, que también dará servicio a los ayuntamientos de Cercedo-Cotobade, Fornelos de Montes y Ponte Caldelas. Tendrá una nave de 600 m2, depuradora de aguas residuales y paneles solares para el propio autoconsumo de la planta.