Galicia consensúa una hoja de ruta para combatir los efectos del ‘brexit’ en la pesca
La Xunta aborda con el sector los pasos a seguir para ir sumando aliados que permitan revertir, con el apoyo de la Unión Europea, un escenario perjudicial
Galicia no se quedará de brazos cruzados ante el jarro de agua fría para el sector pesquero derivado del brexit. Tras la primera reunión que mantuvieron la Xunta y el sector la semana pasada, ayer vía telemática se celebró un pleno extraordinario del Consello Galego de Pesca, presidido por la conselleira do Mar, Rosa Quintana.
En la cita se analizó en detalle el acuerdo alcanzado entre la Unión Europea y el reino Unido sobre el brexit y se expuso la hoja de ruta diseñada por Galicia para la defensa de sus intereses ante todas las instancias.
Esta planificación, según informó el propio departamento autonómico, fue apoyada por unanimidad por los integrantes del pleno.
La estrategia, aseguró la conselleira do Mar, tendrá como base los dos informes que la Xunta ya encargó sobre el impacto del acuerdo, uno técnico administrativo a la Fundación MarinnLeg sobre la incidencia que tendrá en la actividad extractiva y en la comercialización de los productos pesqueros y otro al instituto de Estudios Europeos Salvador de Madariaga de la Universidade da Coruña (UDC) sobre sus implicaciones jurídicas.
Una vez estén disponibles ambos informes, el Ejecutivo gallego convocará un nuevo pleno del Consello Galego de Pesca para analizar y conformar un grupo de trabajo en el que establecer las prioridades del sector pesquero gallego en este ámbito para los próximo ejercicios.
Al mismo tiempo, la Xunta solicitará una reunión con la directora general de Asuntos Marítimos y Pesca de (DG Mare) de la Comisión Europea, Charlina Vitcheva, y con el presidente de la Comisión de Pesca del parlamento Europeo, Pierre Karleskind, para trasladarles el impacto del acuerdo de la UE y el Reino Unido.
Letra pequeña En la misma línea, y para conocer todos los detalles del acuerdo (incluida la letra pequeña), la Xunta ya remitió cartas a los eurodiputados españoles que son titulares o suplentes en la Comisión de Pesca de la Eurocámara con el objetivo de mantener una reunión en el próximo pleno del Consello Galego de Pesca, para exponerles la línea de trabajo de la comunidad autónoma y solicitar que se sumen a ella en sus gestiones ante las instituciones europeas.
En el ámbito europeo, Galicia también va a trabajar con el Comité de las Regiones y con las comunidades y regiones del Arco atlántico en la búsqueda de aliados para evaluar y reconducir la situación puesto que la clave está en seguir actuando unidos en el seno de la Unión Europea.
La hoja de ruta diseñada para actuar ante el brexit da respuesta a un acuerdo que la comunidad considera muy negativo tanto a corto como a medio y largo plazo para el sector (que vuelva a ser empleado como moneda de cambio) por lo que el Consello Galego de Pesca consensuó una actuación coordinada y clara para hacer frente a la incertidumbre generada para la actividad de la flota por la pérdida de capturas.
··· El compromiso alcanzado entre el Reino Unido y la Unión Europea recoge la transferencia del 25 por ciento del valor de las capturas que se realizan en su caladero a la flota británica. Esa cifra fue por la que apostó la Unión Europea desde el primer momento, ya que las negociaciones arrancaron con la reivindicación de un 80 por ciento por parte del Reino Unido.
Pero, el entendimiento final entre las partes fue posible porque el período transitorio se limita a los cinco años y medio, hasta junio de 2026, una fecha en la que la UE tuvo que hacer concesiones. A partir de ese momento las posibilidades de pesca y las cuotas pesqueras pasarán a negociarse anualmente. “Exigirá esfuerzos, lo sé, pero la UE estará al lado de los pescadores europeos para acompañarles”, explicó Michel Barnier, el negociador europeo, tras alcanzarse el acuerdo. En este punto, es en el que toma cuerpo la posición unánime de Galicia para presionar ante las autoridades comunitarias de tal manera que la merma de capturas no deje maltrecha la flota gallega que se resiste a llevar un golpe dramático.
Santiago. La titular de Mar lamentó que el Ejecutivo gallego todavía no hubiese recibido información oficial ni del acuerdo ni de sus términos por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación e incidió en que las consecuencias negativas del acuerdo tendrán efectos tanto en la flota que faena en aguas del Gran Sol como en los buques del caladero Cantábrico-Noroeste.
“Trátase dun asunto que con que afecte a un só elo da cadea mar-industria vai repercutir no conxunto do sector e de Galicia”, aseveró Rosa Quintana.
Al impacto directo en la flota gallega, recordó la conselleira do Mar, se suman otros aspectos como que los buques británicos no se verán sometidos a la Política Pesquera Común ni a normativas como la obligación de desembarque. Al mismo tiempo, el Reino Unido no tendrá que aplicar medidas de reducción del esfuerzo pesquero para garantizar la sustentabilidad de los recursos e incluso podría incrementar su flota puesto que contará con más cuotas que en 2020 gracias al 25 % de las posibilidades de pesca europeas cedidas por el Ejecutivo comunitario con la finalidad de llegar a un acuerdo.
La titular de Mar destacó que la Xunta con su presidente a la cabeza trabajó en la defensa de los intereses de Galicia y recordó que Feijóo remitió ya el 28 de diciembre una carta al presidente del Gobierno demandando que las negociaciones sean llevadas al máximo nivel y que Galicia esté presente en ellas de forma directa.