“Galicia debe convertirse en el Silicon Valley de Europa”
En un momento de explosión de las nuevas tecnologías, Galicia cuenta con unas infraestructuras únicas y unas instituciones generadoras de conocimiento de tal peso que la obligan a intentar convertirse en “el Silicon Valley de Europa”, según defiende David Martínez, el socio fundador de DataSpartan, una empresa con sede en Londres que apuesta por los puestos de trabajo gallegos en remoto.
¿Y qué es Silicon Valley? A día de hoy probablemente ya no queda nadie que no conozca esta área de la bahía de San Francisco, en California, pero, para los más despistados, esta es la sede en la que surgieron muchas empresas emergentes y globales del mundo de la tecnología. Apple, Facebook y Google son solo algunos ejemplos de las compañías más exitosas que allí surgieron.
David Martínez (Ferrol, 1984) organiza los próximos días 16 y 17 de junio en A Coruña, en la Fundación Barrié, el congreso Corunna Innovate Summit, un evento que contará con ponentes como Ignacio Cirac, que es especialista en computación y Premio Príncipe de Asturias de Investigación, o Paco Nathan, uno de los mayores expertos del mundo en big data.
“La idea del congreso es juntar en el mismo lugar a gente de ciencias de la computación con otras personas especializadas en inteligencia artificial, tanto gallegos como extranjeros. Queremos dar visibilidad a un fenómeno de emprendimiento en el mundo digital que está ocurriendo en Galicia pero que la gente no ve”, explica a Efe.
Por eso anima a asistir, de manera gratuita, en un momento en que considera fundamental que “Galicia busque su dirección para las próximas décadas”, pues se plantea una oportunidad que, en su opinión, no se debe desaprovechar.
PARA LOGRARLO, TODAS LAS PERSONAS IMPLICADAS EN LAS TIC Y LAS INSTITUCIONES DEBEN REMAR EN LA MISMA DIRECCIÓN. “Galicia está en una situación ideal para situarse como foco de trabajo en las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación). Tenemos las infraestructuras necesarias y debemos ser referentes en España y en Europa”, subraya.
Apunta, en ese sentido, a la facultad de Informática de A Coruña, que es una de las más grandes del Estado, a la importancia de los estudios en Ingeniería de Telecomunicaciones en Vigo o al esfuerzo realizado en materia tecnológica en Santiago.
“Contamos con profesionales de gran nivel y tenemos suficiente capital para impulsar el emprendimiento a nivel muy serio. Solo hay que darle forma. Es un tema que depende de la voluntad de todos los implicados”, añade.
La comunidad gallega dispone de “educación, conocimiento y capital para poder generar un impacto muy importante”, por lo que cree que falta ese último impulso en el que todas las personas e instituciones implicadas remen en la misma dirección y con la ayuda de la política, que también puede influir.
“Galicia debe intentar ser un foco en el que se atraiga a gente de todo el mundo. Igual que la gente va a Silicon Valley, Galicia debe ser igual en Europa”, defiende.
LA PÉRDIDA DE POBLACIÓN JOVEN EN EDAD DE TRABAJAR JUEGA EN CONTRA DE ESTE RETO. Reconoce que la situación demográfica juega en contra de la Comunidad, con una pérdida muy importante de población, en especial en la franja de entre treinta y cuarenta años, pero es un condicionante negativo que se puede superar.
A pesar de esa situación, en su empresa cuentan con veinticinco puestos de trabajo y apuestan por personal gallego, que trabaja en Londres desde Galicia en remoto.
TODO PODRÍA EMPEZAR EN A CORUÑA, CON LA CIUDAD DE LAS TIC YA EN MARCHA. David Martínez alaba la formación de los profesionales de la comunidad, que con nivel de máster y doctorado se codean con especialistas de primer nivel mundial.
Por eso espera que sirvan como base para que la Galicia del futuro sea más digital y sea capaz de aunar proyectos cruciales en los que se unan todas las partes de la informática y conviertan al noroeste de la península en una referencia.
Una parte ya está en marcha en A Coruña, donde la universidad impulsa un proyecto denominado Ciudad de las TIC, que pretende ser un núcleo de creación de puestos de trabajo vinculados a las nuevas tecnologías, aunque la primera piedra llegó hace escasas semanas y todavía tardará en estar en pleno funcionamiento.