Golpe al narcotráfico con la caída de una banda con red en Galicia

Importante golpe al narcotráfico con la desarticulación de una de las organizaciones criminales más activas en la distribución de cocaína, y que tenía redes en Galicia. Hay 16 personas detenidas por todo el país, y se intervinieron 107 kilos de droga.

La Policía Nacional y la Guardia Civil desarrollaron una operación conjunta de investigación de una de las organizaciones criminales más activas.

Presuntamente, según informa la Policía en un comunicado, se dedicaban “a la distribución de importantes cantidades de cocaína por todo el territorio nacional”. Durante la época de restricciones a las que obligó la pandemia, aumentaron “su frenética actividad, ideando nuevos planteamientos delictivos, al objeto de tratar de no llamar la atención, generando entre sus miembros una sensación de falta de impunidad”.

Los investigadores, que desde el primer momento se centraron en la identificación y detención de los responsables, detectaron que la red estaba estudiando el modo de aumentar el flujo de sustancias hacia Baleares, sobre todo Ibiza, con motivo de la llegada del verano, y el previsible aumento de afluencia.

En el curso de la investigación, los agentes comprobaron que la organización tenía vínculos con personas asentadas en Galicia, que se encargaban de suministrar la sustancia estupefaciente.

Otro de los tentáculos de la organización operaba en Asturias, en donde se detuvo a uno de los considerados actores principales de la estructura criminal. Se trataba de un empresario vinculado al sector de la hostelería.

MEDIOS SOFISTICADOS. Según la información ofrecida por la Policía Nacional, el grupo disponía de medios sofisticados para poder transportar la mercancía.

Lo hacían por varias provincias, sin necesidad de utilizar vehículos que abriesen el paso o informasen de puntos de vigilancia o de presencia policial. Se lo podían permitir porque contaban con sofisticados y complejos sistemas de ocultación en sus vehículos, como los dobles fondos hidráulicos.

Unos vehículos que proporcionaban directamente los líderes de la organización. Los distribuidores, por su parte, operaban en zonas estratégicas para optimizar su eficiencia.

Además, contaban con aplicaciones informáticas de mensajería encriptada, para poder contactar entre ellos pero dificultando el posible rastreo.

En la primera fase de la operación, en el mes de mayo, se aprehendieron 50 kilos de cocaína que estaban en el doble fondo de un coche, 370.000 euros que estaban en otro turismo, y se detuvo a cuatro personas.

A continuación, los agentes registraron cuatro viviendas en Valencia y en Madrid. En estas actuaciones intervinieron vehículos de alta gama, dinero en efectivo, documentación y medios de comunicación encriptada.

En el mes de junio se desarrolló la segunda fase, con once entradas de registros, entre ellos en la provincia de Pontevedra. En este caso, se detuvo a cinco personas, se incautaron 1,3 kilos de cocaína, 32.000 euros en efectivo, cinco vehículos y teléfonos móviles.

Por último, en la tercera fase, de mediados de junio, los agentes intervinieron 15 kilos de cocaína, de nuevo oculta en el doble fondo de otro turismo. Después, realizaron nuevos registros en Madrid y Valencia que se saldaron con otras tres detenciones y la incautación de varias sustancias estupefacientes: 40 kilos de cocaína, dos de metanfetaminas y 500 gramos de cocaína rosa.

Así, este golpe al narcotráfico concluyó con 16 personas detenidas, casi una veintena de registros, la intervención de 107 kilos de cocaína y de otras sustancias estupefacientes, la incautación de 403.000 euros en billetes y de doce vehículos. También se encontró documentación y efectos relacionados con las personas investigadas, así como medios para encriptar las comunicaciones.