La Xunta adelanta que la UE no financiará modelos para tratar la basura distintos a Sogama
La Consellería de Medio Ambiente señala que así se lo trasladó en la comisión sectorial el Ministerio para la Transición Ecológica
Habrá una simplificación de modelos para tratar los residuos sólidos urbanos (RSU) en Galicia. Así lo avanzó ayer la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda. que subrayó que así lo acaba de trasladar la Unión Europea a España.
Según remarcó el departamento autonómico, Europa dejará de habilitar mecanismos de financiación para los sistemas de recogida de residuos que se centren en tratamientos mecánico-biológicos, los conocidos como TMB, basados en la recogida conjunta de todos los productos que, en la planta de tratamiento, se separan mecánicamente y los orgánicos se destinan a la producción de compost.
La Consellería de Medio Ambiente apuntó que así se lo comunicaron ayer por la mañana representantes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en una reunión de la comisión sectorial de Medio Ambiente, en la que confirmaron a las comunidades autónomas que Europea no habilitará recursos económicos para los tratamientos que se recogen bajo la denominación TMB.
En España, alrededor del 51 por ciento de los residuos sólidos urbanos (RSU) generados son tratados en estas instalaciones, abundó el departamento que dirige Ángeles Vázquez.
Actualmente, en Galicia este tipo de tratamientos, según Medio Ambiente, son los que se llevan a cabo en las plantas de Nostián (A Coruña) y Lousame, “polo que –ante a falta de financiamento– parecen modelos a extinguir”, precisó la consellería.
sistema que primará la Unión europea Así, el modelo que primará será el de separación selectiva en origen, en el que cada fracción se deposita en el colector correspondiente, cartón y papel (colector azul), vidrio (iglú verde) y envases, plásticos y bricks (colector amarillo), orgánica (colecctor marrón) y el resto en el contenedor general.
Este modelo de tratamiento, el sistema que aplica Sogama, es por los tanto el que está defendiendo en estos momentos la Unión Europea, que apuesta por la separación de los residuos urbanos desde su origen, de manera que en las plantas de tratamiento como la que existe en el complejo ambiental de Cerceda (A Coruña) sólo se valoriza la fracción resto, añade el gobierno gallego.
En la actualidad, según la Xunta, al modelo de Sogama están adheridos un total de 295 municipios que aglutinan a 2.242.000 habitantes de la comunidad autónoma.
Santiago. El planteamiento de las autoridades europeas trasladado ayer por la Xunta causó sorpresa en las dos plantas gallegas que estarían llamadas a extinguirse por falta de apoyo económico comunitario.
Fuentes próximas a la planta de tratamiento de Lousame (A Coruña) manifestaron, en primer lugar, que no podían “dar crédito” que un pronunciamiento así haya salido de la propia Xunta porque contiene “un gran cúmulo de falsedades”.
Estas mentiras, según las mismas fuentes, van “desde afirmar que las dos plantas de reciclaje reciben la basura mezclada y luego la separan hasta que Sogama sí lo hace”.
Remarcan desde estas instalaciones que los modelos que cita la Xunta en su información reciben la basura por separado, de un lado la fracción orgánica y de otro la inorgánica; y de ahí se procede a compostar y al envío al reciclado final de los inorgánicos (latas, bricks o vidrio, entre otros).
Es más, contraponen esta forma de proceder con la que aplica el Complejo Medio Ambiental ubicado en la localidad coruñesa de Cerceda. “Quien no separa los residuos sólidos urbanos es, precisamente, Sogama, que no tiene recogida y tratamiento de la materia orgánica, salvo casos excepcionales”, apostillan las mismas fuentes.
De otro lado, fuentes próximas a la planta de Nostián no entraron a valorar “una nota preñada de inexactitures”, en línea, coincidente, en lo fundamental, con los planteamientos hechos desde las instalaciones de Lousame.
Ambas infraestructuras cuentan con subvenciones de la Unión Europea, tanto en la fase inicial para su construcción como después en la gestión de los residuos sólidos urbanos.
La planta de Nostián fue impulsada cuando era alcalde el socialista Francisco Vázquez y contó con el aval de la organización ecologista Greenpeace. Trata desde 1999 los residuos de la ciudad de A Coruña y los municipios integrados en el Consorcio As Mariñas: Abegondo, Arteixo, Bergondo, Betanzos, Cambre, Carral, Culleredo y Oleiros.
Las instalaciones de Lousame comenzaron a funcionar en 2003 y presta servicios a los ayuntamientos de la Mancomunidad de la Sierra del Barbanza, con 86.000 habitantes. redacción