Catedral de Santiago, la razón de ser de una urbe universal que forjó Europa

La monumental Catedral de Santiago de Compostela, que en la guía del pasado año ocupaba la segunda posición -por detrás de la playa de As Catedrais de Ribadeo- recupera en esta edición el primer puesto. Esta Basílica constituye la obra más sobresaliente del arte Románico en España, aunque en ella están representados todos los grandes estilos arquitectónicos. Pero esta Catedral es mucho más que una simple obra de arte o un templo de culto. Es, además, la meta final de todos los caminos de Santiago, que durante siglos han orientado a los peregrinos de la Cristiandad hacia la tumba del Apóstol. Y por si esta carta de presentación no fuese suficiente, fue la piedra inaugural y la razón de ser para la construcción de una urbe monumental que nació en un bosque sagrado y que muy pronto dejó traslucir su vocación de ciudad cosmopolita que acabaría por convertirse en Patrimonio de la Humanidad. El paso de más de seis millones de personas al año convierten la Catedral de Santiago en uno de los monumentos más visitados de España y el primero de Galicia. Varias son las razones que explican este atractivo. Una de ellas es su espectacular belleza arquitectónica y artística, con el Pórtico de la Gloria como ejemplo sobresaliente del Románico y con la fachada barroca del Obradoiro como una de las más bellas del mundo. Entre los ritos emblemáticos que la envuelven, cabe destacar el vuelo del botafumeiro, inmenso incensario que oscila sobre las naves laterales desde la cúpula central ayudado por ocho tiraboleiros; la visita a la cripta con las reliquias del santo; el abrazo al Apóstol que mira hacia el altar mayor, o la apertura de la Puerta Santa en los años jacobeos, que anuncia periodos de gracia espiritual.