Respiro ‘fantasma’ en la cesta de la compra en pleno castigo por el récord de las gasolinas
El conjunto de 54 referencias básicas de alimentación y droguería reduce de media un 4,7 % su precio en enero frente a diciembre // Marca 622,86 € y baja en un mes treinta, pero frente a noviembre es tres euros más caro
Tener que parar en una estación de servicio a llenar el depósito del coche se está convirtiendo en casi una agonía. El litro de gasolina, a 1,58 euros de media, y el de gasóleo, a casi uno con 1,47, marcan cifras récord en la comunidad gallega y en España, amparadas en un barril de petróleo en niveles máximos desde 2014.
Con un Brent, oro negro de referencia para Europa en sobre los noventa y tres dólares y medio, la mayoría de los indicadores apuntan a la continuidad del alza en los precios. Según Andrés Aragoneses, analista de Singular Bank, “el mercado sigue muy tensionado con una demanda muy fuerte, a la que no responde la oferta con aumentos de producción, lo que se refleja en unos niveles de inventarios en descenso”.
Así, llenar el depósito hoy en Galicia es 16 euros más caro que hace justo un año, tras un repunte por litro en los carburantes superior a los 32 céntimos de euros. Pero ojo, porque sólo en el último mes ese mismo depósito de 50 litros de un turismo promedio es 3,60 euros en el caso de la gasolina y 4,35 € si es un diésel. Las gasolineras más caras de Galicia ya rozan 1,70 el litro en el primer caso y 1,58 en el caso del gasóleo. Como para parar y no echar gota.
En medio de esta vorágine de precios, la tercera oleada del Observatorio de Precios de la Unión de Consumidores de Galicia (Ucgal) para EL CORREO GALLEGO permite situar la cotización de la cesta básica de 54 referencias –alimentos frescos, envasados y productos de droguería– multiplicadas por el consumo tipo de casi cualquier hogar en los 622,86 euros al cierre de enero.
Si bien es un 4,7 % menos que los 655,57 marcados en diciembre, a un par de días de las fiestas navideñas, descontada la inflación festiva supone una subida de tres euros sobre 619,88 euros marcados a mediados de noviembre, cuando se realizó la toma de datos en los supermercados de nueve de las principales cadenas de la distribución: Gadis, Vegalsa Eroski, Froiz, Mercadona, Carrefour, Dia, Lidl, Alcampo e Hipercor.
En el análisis por apartados, la cesta recoge un descenso especialmente remarcable en el caso de los pescados, que ronda el 17,6 %. Marca 172,68 euros, cifra muy por debajo de los 209,49 que alcanzaban la merluza del pincho y el salmón o los gallitos, la lubina o los mejillones en las vísperas de la Navidad, causante para Ucgal de ese alto nivel. Pero el caso es que también bajaría frente a los 184,83 € de noviembre. De hecho, baja todo con fuerza menos el salmón, que es incluso más caro que en la antesala de las fiestas.
Las carnes volvieron a destacar un mes más por su estabilidad, pues con 71,96 euros, apenas bajaron un 0,6 % frente a los 72,39 del mes anterior, y poco suben frente a los 71,74 euros marcados el precedente. Suben ternera y cerdo, baja algo el conejo y sobre todo el pollo.
La rebaja en la sección de las hortalizas se situó, de media, en un dos por ciento frente al dato de diciembre, con 56,13 euros, por debajo de los 57,30 de entonces. Sin embargo resultan mucho más caros los productos que en noviembre, cuando marcaron 52,17. Lo que más baja son las cebollas y ya menos los pimientos verdes o las lechugas, porque zanahorias, patatas o tomates resultan algo menos asequibles.
Sorpresa en la frutería, pues repuntan los precios a finales de enero en comparación con diciembre y sus villancicos, 68,67 euros que superan los 67,42 marcados entonces, casi diez euros sobre los 58,86 euros de mediados de noviembre. Suben las naranjas o las uvas, bajan las mandarinas, plátanos o peras rojas.
En alimentación envasada se produce la subida que Ucgal se temía llegaría en algún momento en el entorno de alza de costes de embalajes o energía. De los 115,75 euros de diciembre, cifra similar a la del mes previo, a finales de este enero se encarecen un 3 % a 117,38 euros. Hay subidas generalizadas –en especial en los lácteos– menos en las conservas, que siguen estables.
En congelados, fiambres y varios apenas hubo variación, al pasar de los 64,53 de diciembre a 64,21, a pesar de la gran subida de la merluza congelada. Las bebidas se dispararon por la cerveza un 4,3 %, de 32,99 a 44,42 euros. Y en droguería hubo una escalada del 4,8 %, de 35,71 a 37,41 euros, por los champús o el detergente para lavadora, entre otros.
Secretario xeral de la Unión de Consumidores de Galicia (Ucgal)
Reconoce que fue muy relevante la fecha de la anterior toma de datos, a dos días para la Nochebuena, lo que tuvo “bastante que ver” con el incremento de precios, sobre todo del pescado. “Pero si echamos mano del precio que teníamos en noviembre y el que nos queda en enero no nos han bajado los precios, al contrario”, apunta. Aunque se limite al 0,5 % porcentual –lejos del repunte global del IPC– “no deja de ser una subida, acompañada por ese alza brutal de los carburantes y del gas, aspecto que me gustaría destacar un poco, porque se está hablando muy poco de su impacto en los hogares, que será grande”, alerta López.
En la Unión de Consumidores de Galicia ponen el acento sobre el impacto que está teniendo el gas en el mercado libre, que disparó su coste. Hay multitud de casos de personas a las que les vencía el contrato en estas fechas o los últimos tiempos, y los precios nuevos para el suministro son de hasta el triple de lo que tenían antes marcado. Ponen el ejemplo de un contrato en el mercado libre que por descuentos que conllevaba resultaba más interesante que en el mercado regulado: de 3,9 céntimos el kilovatio hora, sólo un año después pasaba a 10,9. “Y eso dentro de una de las tarifas más económicas existentes a día de hoy en el mercado libre”, alerta Miguel López, porque se mueve por lo general entre los 11 y hasta 15 céntimos. En el mercado regulado está, pese a que subirá seguro, en 4,5 centimos, e insta así a cambiarse –no ocurre como en la luz– y a vigilar si la energética les notificó el cambio de tarifas y, de no ser así, reclamar. Y es que hasta más de 350 euros podría llegar a pagar una familia que, en pleno frío actual, por una factura por dos meses por la que antes abonaba unos 150.
Volviendo al observatorio de precios de Ucgal para EL CORREO GALLEGO, éste analiza la evolución de esos dos kilos de ternera mensuales, otro tanto de lomo de cerdo y conejo, ocho de pollo; en pescados, cuatro kilos de lubina, salmón al corte, merluza del pincho, mejillones y gallitos. Se incluyen 16 kilos de patatas, cinco de cebollas y tomates, cuatro de pimiento verde y zanahorias y ocho lechugas; en frutas, de ocho kilos de naranjas de zumo a cinco de plátanos, manzanas golden, peras rojas y mandarinas, y uno menos de uvas. En alimentación envasada, tres kilos de arroz y los mismos litros de aceite de girasol y oliva, o dos de garbanzos, habas o lentejas, con uno de espaguetis, otro de azúcar, treinta de leche entera, cinco docenas de huevos, diez packs de yogures de ocho unidades, cuatro latas de atún y de sardinas, y otros tantos brics de tomate frito y bolsas de salchichas. En congelados, un par de kilos de merluza, tres de guisantes y judias, y en fiambreun kilo de jamón cocido, 600 gramos de queso de barra y 300 de chorizo, así como 30 barras de pan. En bebidas agua mineral (30 botellas de 1,5 litros), ocho litros de zumo y tres packs de seis de cervezas. Y en droguería, detergente para lavadoray suavizante, pasta de dientes, champú y gel de ducha, papel higiénico, friegasuelos y lavavajillas.
Santiago. Muchos fueron los mayores de 65 años, y no tan veteranos, que este sábado decidieron dejar tranquilas sus tarjetas de crédito y débito en el bolsillo. Dentro de la campaña ‘Soy mayor, NO idiota’ las redes sociales propiciaron esta huelga en el uso del dinero de plástico para que los bancos, destinatarios últimos del mensaje, se diesen cuenta de que es necesario un trato más humano y menos digital en las sucursales bancarias: “Tengo casi 80 años y me entristece mucho ver que los bancos se han olvidado de las personas mayores como yo”.
Así lo apunta Carlos San Juan, un hombre de 78 años, que a través de Change.org inició esta campaña de recogida de firmas que se ha convertido en colosal. Sólo hace un mes cuando nacía ‘Soy mayor, NO idiota’, y entonces los responsables de la plataforma se ponían en contacto con Carlos, que les indicaba que solo había logrado noventa apoyos aunque se lo había pasado “a todas las personas que conozco”.
Entonces les dijo que “a lo mejor esto de los bancos y las personas mayores no le interesa a la gente”. Sin embargo, desde Change.org señalan en un comunicado que “decidimos apoyar a Carlos ayudándole con su petición y difundiéndola, y la respuesta fue abrumadora. En unas horas esas 90 firmas de Carlos se convirtieron en 100.000. La gente no dejaba de apoyar y de compartir. Y en unos días pasó de las 100.000 a las 500.000. ¡De 90 firmas al medio millón!”, destacan sus responsables.
Desde entonces Carlos San Juan no solo ha estado en multitud de los principales medios de comunicación, sino que desde Change.org apuntan que también recibió la llamada telefónica tanto del Ministerio de Economía “como del mismísimo gobernador del Banco de España, que le llamó personalmente para interesarse por su petición”. Además, días después la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, urgió a los bancos a garantizar la inclusión financiera de los mayores y en el Senado se mencionó su petición.
Pero el proceso no para, y según Change.org el martes San Juan viajará de Valencia a Madrid para registrar sus firmas en el Ministerio de Economía y la autoridad bancaria. En el primero las van a recibir personalmente y, gracias a la campaña, le convocan para una reunión en la que podrá explicarles por qué es tan necesaria y les instará a una intervención urgente para garantizar una solución. Hasta entonces aún se puede firmar la petición. S. R.
··· Los abusos contra los consumidores y usuarios son muchos y variados. Uno de los que más actividad está propiciando es la relativa al conocido como cártel de los coches, después de que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) multase, entre 2015 y 2016, a 21 fabricantes, 172 concesionarios y dos consultoras por prácticas anticompetitivas, probando que pactaron precios entre 2006 y 2013, lo que propició que los compradores pagasen más por sus vehículos de lo que les correspondía. Tras confirmar el Tribunal Supremo las multas, se abrió la veda para las reclamaciones.
··· Son legión las webs y despachos de abogados que prometen recuperar entre un 10 y un 15 % de lo pagado. La Unión de Consumidores de Galicia (Ucgal) da por buenas estimaciones que elevan los posibles afectados en la comunidad a 400.000 coches. Apuestan por el cara a cara y prevén realizar una treintena de actividades informativas por toda Galicia. Tras las de Santiago, Lugo, Cangas, Ribeira y Vimianzo a las que asistieron 243 personas identificaron ya a 144 víctimas del cártel. Ahora irán hasta Monforte, Ourense y Ribadeo.