Sale de Ferrol el buque ‘Stalwart’ y estructuras del parque Kincardine
El barco es otra unidad logística para la Armada australiana y los armazones van hacia Holanda
Los astilleros de Navantia en la ría de Ferrol acogieron ayer un doble movimiento. Por un lado la marcha del buque Stalwart, segunda unidad logística para la Armada de Australia, y, por el otro, de una nueva estructura del parque Kincardine, el mayor recinto eólico flotante de Europa en aguas de Holanda.
En el primer caso, el barco ha iniciado sus pruebas de mar y ha abandonado la planta pública pasadas las 09:00 horas. El barco, basado en la plataforma del Cantabria, contará con unas 130 personas a bordo durante dichos ejercicios.
Las pruebas permitirán ratificar la operatividad de su plataforma y de los sistemas de propulsión, control y navegación, además de su maquinaria propia. Personal de la Marina australiana supervisará el despliegue, en el que también se espera que estén presentes miembros de la Armada de Portugal en calidad de observadores.
La compañía dependiente de la SEPI prevé que estas maniobras, a las que se suman trabajadores de plantel principal y auxiliar, concluyan el próximo martes.
Una vez superados estos ejercicios, el “Stalwart” podría comenzar su viaje definitivo a Australia a mediados del próximo mes de abril. Ya en su destino, integrantes de Navantia ultimarán la entrega del barco al Estado oceánico.
La botadura del buque tuvo lugar en el astillero de Ferrol en agosto de 2019 y el remate de este contrato supone el inicio de un período en el que el recinto permanecerá sin nuevos encargos a la espera del programa de las fragatas F-110 para la Armada Española.
Por otro lado, de Navantia Fene ha partido al mediodía de este sábado el barco que transporta la tercera de las cuatro estructuras desarrolladas para el proyecto Kincardine, el mayor parque eólico flotante de Europa.
La embarcación, el semisumergible “Fjord”, se dirige al puerto de Róterdam, en Holanda, donde se completará el entramado con los elementos restantes para su instalación final en aguas de Escocia.
De este modo, solo resta por trasladar una de las cuatro partes que compondrán el complejo marítimo.