Seis meses después de su estreno, el AVE sigue siendo más costoso que el avión

Día 21 de diciembre de 2021. La prometida alta velocidad por fin había llegado a la comunidad gallega. Ourense se conectaría con Madrid, desde entonces, a través de dos trayectos diarios de apenas dos horas y cuarto de duración. La mal llamada ‘periferia’ se acercaba al centro de la Península y, según garantizaban políticos e instituciones, más pronto que tarde las demás grandes ciudades gozarían también del AVE.

Los trenes Avril serían los que marcarían el antes y el después, y los que permitirían que la alta velocidad cruzase también hasta Santiago, A Coruña, Vigo... Estaba previsto que entrasen en funcionamiento en verano, pero hoy es 25 de junio y poco (o más bien nada) es lo que sabemos de ellos. Únicamente, la última noticia, que se encuentran en fase de pruebas en la comunidad gallega. Sobre su puesta en marcha para el transporte de pasajeros, no hay fecha conocida.

Lo que sí sabemos a ciencia cierta es que el AVE en Ourense ha sido un éxito, preludio de lo que podría suceder con él en el resto de ciudades gallegas. Seis meses de alta velocidad han resultado en más de 850.000 viajeros, lo que, haciendo cálculos, resulta en unos 4.722 pasajeros por día. Esto supuso un incremento acumulado de personas del 184,8 % sobre el periodo anterior a la crisis (comparativa entre el 21 de diciembre de 2018 y el 20 de junio de 2019 con el 21 de diciembre de 2021 y el 20 de junio de 2022).

Cada semana, Renfe ofrece en sus trenes más de 40.000 plazas para desplazarse entre Galicia y Madrid y, en dos fechas clave, se batió el récord de viajeros por día con más de 7.300 clientes: en concreto, el viernes 13 de mayo (la víspera de San Isidro en Madrid) y el martes 17 de mayo (el Día das Letras Galegas en Galicia).

Asimismo, según datos de la propia organización ferroviaria, esos 850.000 viajes se traducen en un ahorro de unas 38.592 toneladas de CO2 a la atmósfera, que son las que se emitirían si los viajeros hubieran usado su vehículo particular en lugar del transporte público.

Ahora bien, a pesar del éxito, hay que tener en cuenta que, aún a día de hoy, los precios de un billete de AVE siguen resultando poco económicos con respecto a los de un billete de avión. Desde EL CORREO hemos consultado el coste de las opciones de viaje en tres fechas diferentes tanto en tren como en avión y el sobrecoste del AVE es unos 40 euros, de media, más caro.

En concreto, este último fin de semana de junio, del 25 al 26, los billetes de AVE de Santiago a Madrid ida y vuelta son imposibles ya de conseguir. Hay una opción de ida desde 92,90 euros (en la categoría ‘elige’, que te permite escoger asiento), pero no hay ninguna de vuelta, está todo agotado (y todo se refiere a las dos únicas conexiones Madrid-Santiago que hay realizando trasbordo Avant-AVE).

Billetes de avión sí que todavía quedan disponibles, aunque, como cabe esperar, con precios por las nubes. Por ejemplo, el más barato sería con Iberia, trayecto directo tanto de ida como de vuelta, por 228,63 euros.

FIN DE SEMANA DEL 2 Y 3 DE JULIO: AVE POR 114 EUROS Y AVIÓN POR 87. Para el próximo fin de semana, el primero del mes de julio, que va del día 2 al 3, el precio para el trayecto Santiago-Madrid ida y vuelta parte de los 48,85 euros el billete del plan ‘básico’ (sin posibilidad de elegir asiento), continuando por los 55,85 del plan ‘elige’. No resulta demasiado caro, aparentemente, pero lo que duele más al bolsillo es la vuelta, pues de las dos combinaciones posibles, la más barata es la de la tarde-noche, por un precio de 83,60 euros; y la de la mañana-mediodía estaría por 107,60 euros. Al final, ida y vuelta a Madrid desde Santiago, en la opción más barata, costaría unos 132,45 euros, que tras aplicar un pequeño descuento, quedarían en 113,90.

No se trata de un precio desorbitado, pero comparado con el del billete de avión sí está caro. Y es que un vuelo de ida y vuelta con Ryanair desde el aeropuerto de Santiago hasta Madrid ese primer fin de semana de julio puede conseguirse a partir de los 87,41 euros, es decir, unos 45 euros más barato. Y con horarios más o menos similares a los del AVE, desde la mañana del sábado a la mediodía del domingo. Además, en un menor tiempo, de las 3 horas y 7 minutos de duración que ofrece el AVE a las solo 1 y 10 minutos del avión.

SÁBADO 6 Y DOMINGO 7 DE AGOSTO: AVE DESDE 98 EUROS Y VUELO DESDE 48. Finalmente, a más largo plazo, por aquello de que cuanto antes se reserva más barato se encuentra el viaje, para el primer fin de semana de agosto, es decir, entre el sábado 6 y el domingo 7, se puede comprar un viaje de AVE desde Santiago a Madrid a partir de los 41,90 euros en categoría ‘básica’ o desde los 48,85 euros en ‘elige’.

El problema vuelve a ser la vuelta, porque de Madrid a Santiago el precio asciende, si bien no tanto como a corto plazo. Regresando a mañana-mediodía se puede conseguir billete desde los 59,85 euros en categoría ‘básica’ o desde los 67,30 euros en ‘elige’. Y regresando a la tarde-noche, desde los 55,85 euros en ‘básica’ y desde los 55,75 euros en ‘elige’. Combinando las opciones más baratas, esto resultaría en un precio de 97,65 euros, por debajo de los 100.

No está mal, pero el avión sale por la mitad. En concreto, con Ryanair, el vuelo directo tanto de ida como de vuelta Santiago-Madrid y Madrid-Santiago partiría de solo 47,81 euros para ese primer fin de semana de agosto. Y, de nuevo, cabe tener en cuenta el tiempo que un viajero se ahorra con el avión: prácticamente dos horas menos de trayecto que en el AVE.

Con estos precios, parece que no ha cambiado mucho la cosa desde su estreno aquel 21 de diciembre de 2021, cuando los billetes sobrepasaban los cien euros.