“Urge revertir la brecha de género que afecta a la FP”
Es un hecho que en los últimos años la Formación Profesional (FP) no deja de ganar adeptos. Analizando el creciente incremento de matriculaciones, pero sobre todo el propio mercado laboral que cada vez oferta un mayor número de puestos asociados a titulaciones técnicas, podríamos afirmar con seguridad que la FP está de moda. Esto se debe principalmente a que avanzamos hacia una sociedad digitalizada donde la proyección de empleo para las competencias y ocupaciones tecnológicas es mayor.
Sin embargo, este aumento en el número de estudiantes no ha conseguido reducir la brecha de género que atormenta históricamente a la FP. Desde el IES de Vilalonga en Sanxenxo advierten que “la existencia de ciclos formativos con una matrícula mayoritariamente femenina y otros con matrícula mayoritariamente masculina es una realidad palpable que urge revertir”.
Concretamente en familias profesionales de carácter STEM, como Electricidad y Electrónica, Transporte y Mantenimiento de Vehículos, Informática y Comunicaciones o Instalación y Mantenimiento, las mujeres están infrarrepresentadas en comparación con los hombres. Esto se debe principalmente a su tendencia a concentrarse en ocupaciones, normalmente en servicios y de carácter asistencial, sujetas a estereotipos de género.
Las consecuencias de esto afectan directamente a la calidad de vida de las mujeres, dado que la elección condiciona un peor salario futuro y menores posibilidades de encontrar trabajo en comparación con las mujeres que optan por estudios STEM.
Si bien en los últimos años ha aumentado notablemente la cantidad de ofertas de empleo en las que se requiere una titulación técnica, lo cierto es que no todos los perfiles asociados a estas titulaciones han crecido en igual proporción. Mismamente en el mercado laboral se buscan cada vez más perfiles profesionales técnicos en trabajos manuales y tecnológicos, y es ahí donde las mujeres están en clara desventaja al tratarse de estudios que demandan mucho menos que los hombres.
El principal motivo de que estos estudios con buenas perspectivas profesionales sigan siendo poco demandados por las mujeres es que la elección de las familias profesionales sigue estando claramente determinada por los estereotipos de género imperantes en la sociedad.
Según un estudio realizado el año pasado por el Ministerio de Educación y Formación Profesional, en los Ciclos Formativos de Grado Superior de la familia profesional de Transporte y Mantenimiento de Vehículos, el 97,5% de las matrículas fueron masculinas, como también lo fueron el 96,7% de las matrículas de Instalación y Mantenimiento. Sin embargo, la matriculación de las mujeres supone más del 70% en familias profesionales tales como “imagen personal” (92%), “servicios socioculturales y a la comunidad” (86,5%); textil, confección y piel (83,5%); y “sanidad” (74%).
El caso concreto del IES de Vilalonga nos ofrece una radiografía de la actual situación de las profesiones conocidas como STEM. En el conjunto de los diferentes Ciclos de Automoción que imparte el centro las mujeres representan menos del 1% de las matrículas. Nos encontramos únicamente con 4 mujeres matriculadas de un total de 71 alumnos.
En un intento de revertir esta situación, la Coordinación de Igualdad del centro está llevando a cabo una serie de iniciativas que pretenden visibilizar de forma lúdica esta problemática, fomentando así la igualdad en la elección de itinerarios formativos y laborales. La mayoría de estas están relacionadas con la formación, enfocada tanto en el alumnado como en el profesorado.
Entre las diferentes iniciativas que se están llevando a cabo se encuentra la realización de un reportaje fotográfico, en el que se puede observar a las alumnas matriculadas en el Ciclo de Automoción realizando distintas actividades en el taller donde reciben su formación.
El objetivo de esta campaña es “promocionar los ciclos formativos con un enfoque libre de estereotipos de género” y crear conciencia sobre la poca presencia femenina entre el alumnado y profesorado, ayudando así a revertir la situación. Dicho reportaje será expuesto en un lugar visible para toda la comunidad educativa con motivo del Día Internacional de la Mujer.
ACTUAR DESDE LA EDUCACIÓN. “Desde los centros educativos entrenamos la mirada y trabajamos para implementar la perspectiva de género que sirva para visibilizar y promocionar referentes femeninos, libres de condicionamientos de género y que no condicionen las vocaciones del alumnado”, explica Patricia Diáz, coordinadora de igualdad del centro. “Es un trabajo arduo y lento, porque materializarlo en acciones concretas de la vida diaria supone desaprender el machismo, un esfuerzo común que implica a toda la sociedad”, asevera.
Finalmente Diáz González resalta la importanca de apostar desde los centros educativos por un presente feminista que avance hacia la consecución de la igualdad efectiva entre mujeres y hombres.