El exceso de velocidad y las vías convencionales, las causas de la mayor parte de accidentes mortales
En estas carreteras se produjeron un 93% de los siniestros con fallecidos en lo que va de año
El exceso de velocidad y las carreteras convencionales son algunas de las principales causas de accidentes en las carreteras gallegas. Los siniestros están aumentando, pese a que se produjo una reducción del número de vehículos que circulan por las diferentes vías, como consecuencia de las restricciones de movilidad de los últimos meses y del aumento del teletrabajo.
La Comisión Autonómica de Tráfico e Seguridade Viaria se reunió para abordar este repunte, con la presencia del delegado del Gobierno, José Miñones, y de la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez.
Miñones afirmó que hay preocupación por este “repunte da siniestralidade”, y señaló que “a pesar da baixada do tráfico pola pandemia, os accidentes non diminúen na mesma proporción”.
En lo que va de año, han muerto 37 personas en las carreteras gallegas, siete menos que en 2019 a estas alturas. La mayor parte de ellas (16), en la provincia de A Coruña, por delante de Pontevedra (13), Lugo y Ourense (cuatro cada una).
El 93% de los fallecidos sufrieron accidentes en vías convencionales, frente al 7% que perdió la vida en autopistas y autovías. El 64% de las denuncias por parte de la Guardia Civil fueron por exceso de velocidad. También hay un importante volumen de denuncias y accidentes como consecuencia de distracciones por el uso del teléfono móvil. Un 56% de los siniestros se produjeron en horario nocturno. Y en un 47% de los casos hubo presencia de animales en la carretera.
EL PERFIL. La mayor parte de los fallecidos responden a los siguientes patrones: varones de entre 25 y 55 años que pilotaban vehículos de más de 10 años de antigüedad, y que se salieron de la vía por exceso de velocidad.
MEDIDAS. Miñones enumeró algunas de las iniciativas que está llevando a cabo el Gobierno central para tratar de reducir la siniestralidad, como el límite a 90 kilómetros por hora en vías convencionales, o el impulso de las Ciudades 30, que establecen ese tope de velocidad en los principales núcleos de población.
Además, destacó que el año pasado se destinaron a Galicia 421 millones de euros “no compromiso coa seguridade viaria galega”: 17 millones en proyectos aprobados, 31 en obras contratadas en carreteras, 39 en puestas en servicio y 16 de obras ejecutadas, a los que hay que sumar 318 millones en ejecución.
También Ethel Vázquez enumeró algunas de las líneas de actuación de la Xunta, como las obras acometidas para eliminar zonas en las que se sucedían los accidentes, o la mayor seguridad de los pasos de peatones a lo largo del Camino de Santiago. Queda pendiente el uso de tecnologías para conseguir detectar y reducir la presencia de animales.
Para Vázquez, es fundamental la “concienciación” en ese objetivo común de reducir la siniestralidad a cero.
CAMPAÑAS. El Gobierno y la DGT seguirán intensificando la vigilancia en las carreteras. Desde este miércoles y hasta el próximo 22 se hará una campaña de vigilancia de consumo de alcohol y drogas en los principales núcleos poblacionales de la comunidad.
Y en verano, con el objetivo de “cero víctimas”, se desarrollará otra intensa campaña que será presentada en los próximos días con unos 1.000 agentes vigilando las carreteras gallegas. “Este verán non permitiremos que ninguén poña vidas en risco”, manifestó Miñones.
El pasado año se controló la velocidad de 3.248.903 vehículos, y se realizaron más de 477.000 pruebas de alcohol, según detalló el delegado.