Castro: "La tala revela el interés del Concello en paralizar el PXOM"

La rueda de prensa ofrecida ayer por el líder del BNG de Ordes, Gonzalo Castro, y sus ediles, María Xosé Raña y Ramiro Recouso, lejos de pacificar la polémica entre el gobierno del independiente Manuel Regos (en coalición con el PSOE) y los nacionalistas, vino a avivar la llama en el fuego cruzado de acusaciones sobre la responsabilidad en la criticada tala de árboles en el paseo ordense Iván Raña y el futuro (inmobiliario) de la parcela.

Después de que el ejecutivo de Regos señalase a Medio Rural como único responsable de dicha corta de árboles, en el margen izquierdo del río Mercurín y en un espacio protegido por la Red Natura, Castro identificaba ayer como responsables directos de la tala a la Consellería de Medio Ambiente (PSOE) y, sobre todo, al Concello de Ordes, limitando la competencia de Medio Rural a la preceptiva firma de la autorización en base al informe en este mismo sentido de Aguas de Galicia, organismo dependiente de Medio Ambiente.

Además, Castro incidió en la "deixación de funcións" del ejecutivo ordense por "non ter aplicado a Ordenanza Municipal de Plantacións Forestais que establece que para poder cortar árbores no término municipal será necesaria a notificación previa ao Concello polo responsable da mesma", algo que no ocurrió en este caso. Según el BNG, "a ausencia desta comunicación sería motivo máis que suficiente para que o Concello paralizase a tala".

La señalada "deixación de funcións" no sería, según la versión nacionalista, desintencionada ya que el gobierno se habría "aproveitado das normas urbanísticas aprobadas por Regos na súa etapa no PP" para permitir una futura edificación en una zona "que no avance do PXOM se recollía como zona verde". Dicha permisividad con la construcción respondería, según Castro, "a intereses persoais do goberno na realidade e a normativa urbanística actual para permitir construir en lugares que o PXOM non permitiría e por eso o paralizaron".