Cifran en un 40 % el alumnado de Ames que sufrió algún acoso

El estudio sobre consumo de drogas y las conductas adictivas realizado por la Universidade de Santiago y el Concello en base a las consultas realizadas entre 1.263 alumnos de Ames de entre 10 y 18 años de edad continúa arrojando resultados reseñables en conductas ajenas a los estupefacientes. Así, el trabajo que coordinó el profesor Antonio Rial deja claro que el 40,3% de los chavales encuestados manifestaron haber sufrido acoso, y al menos un 22,8 ha apostado alguna vez, cifrándose en un 4,4 por ciento los que lo hacen con frecuencia.

Así se desprende de los datos divulgados por el propio Rial junto al regidor y la edila de Servizos Sociais de la capital amaiana, con la mira puesta en "analizar os niveis e patróns de consumo existentes, facer un cribado tanto dos posibles consumos de risco e adiccións como das variables asociadas", explican. Además de explicar los contenidos desde el consistorio, también se informó a centros educativos y, por ejemplo, en el Instituto de O Milladoiro contó con una jornada de prevención destinada a los protagonistas del trabajo: la comunidad educativa de este ayuntamiento.

En lo que atañe a la relación de los más jóvenes con las nuevas tecnologías, que el propio coordinador del trabajo calificó como "problema serio", el estudio es claro al afirmar que prácticamente todos los adolescentes de 12 a 18 años (un 93,4%), dispone de teléfono móvil con conexión a internet, y lo usan de forma "masiva, sen supervisión e interfire na convivencia familiar". Por ende, el uso de redes sociales y herramientas de mensajería es asimismo generalizado y va en aumento, ya que el 95,9% de los chavales están registrados al menos en una red social, mientras que el 59,1% lo están en tres o más. Sobre esta cuestión, el 57,7% admite que cuenta dentro de la misma red con más de un perfil (uno blanqueado para sus padres y otro personal para relacionarse con amigos). Otro de los resultados preocupantes que incluyen las encuestas es que el 24,4% de jóvenes están comezando a desarrollar una adicción a internet, porcentaje que se dispara entre los amienses de 14 a 15 años.

Sin salir de las TIC, y si bien es habitual que los menores dediquen en torno a cinco horas semanales a los videojuegos, ya hay un 1,5 % que juegan más de 40 horas. Además, el 81,5 % de los que lo hacen habitualmente se divierten on-line. También se refieren a que un 22,8% de los adolescentes residentes en el Concello de Ames confiesa haber apostado dinero en máquinas de apuestas deportivas, tragaperras, loterías "ou outras modalidades de xogo, de xeito presencial, mentres que un 7,7 % manifesta ter realizado apostas on-line" y alrededor de un 25,8 por ciento se declararon víctimas de bullying (y un seis por ciento de cyberbullying).

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non son moi optimista sobre a posibilidade de que o consumo de drogas e outras condutas aditivas mellore en tanto que as cabezas pensantes do gremio da Educación douselles por meter nos institutos a nenos de 12 anos de primeiro da ESO. Claro, son rapaces cativos demais que conviven con outros de 17 e 18 que posiblemente veñan de volta de todo. E aínda que está claro que a convivencia interxeneracional adoita ser positiva, o problema está en que estamos a falar da adolescencia, etapa delicada onde uns tentan amosar o que aínda non son, e outros toman coma exemplo de comportamento plausíbel o que ven. Mellor sería agardar ata os 14 para xuntalos.