Las creadoras del dron salvavidas se coronan como Gallegas del Año
Andrea Magán, Tays Ferrer, Macarena Arcay y Susana López lanzaron el tercer mejor dispositivo del mundo
De Ferrol, al cielo de Dubái. Y de Oriente Medio, al resto del mundo. El dron creado por las cuatro estudiantes de la Escuela Universitaria de Diseño Industrial de Ferrol figura entre los tres mejores del mundo. Y ahora convierte a sus cuatro creadoras en inmejorables miembros del club Gallegos del Año. Por unanimidad, el consejo de redacción de EL CORREO GALLEGO otorga este reconocimiento a Andrea Magán, Tays Ferrer, Macarena Arcay y Susana López. Estas cuatro universitarias han diseñado un dispositivo salvavidas para el transporte de órganos destinados a trasplantes. Su proyecto bautizado como Dronlife logró la tercera posición en el concurso internacional Drones for Good, organizado por los Emiratos Árabes. Y superó incluso a iniciativas desarrolladas por la propia NASA con la Universidad de Oxford. Todo un éxito que demuestra la gran proyección de estas jovencísimas Gallegas del Año.
Nada más conocer el reconocimiento que otorgan los periodistas de este diario, las galardonadas demostraban su gran agradecimiento: "Es un orgullo para nosotras recibir este premio, supone una motivación adicional para poder seguir con nuestro proyecto". Además, las cuatro estudiantes de la EUDI afirman que se sienten así incentivadas "en el espíritu de querer salir adelante, desarrollando el talento y el conocimiento". Dedican el premio al equipo docente de la Escuela Universitaria de Diseño Industrial. Pero también a las empresas que las apoyaron en el desarrollo del proyecto y en su participación en Dubái: IFFE (apoyo financiero) y CartoUVA (apoyo técnico).
El lanzamiento empezó precisamente en la capital de los Emiratos Árabes, a donde acudieron con un prototipo que ya permitía el transporte de pequeños órganos como córneas. Se trataba del único equipo formado al 100 % por mujeres estudiantes universitarias, frente a otros participantes que procedían de empresas. Su Dronlife permite "el transporte de órganos entre hospitales, o entre ciudades". Su innovación radica en la instalación de un refrigerador en un dron tan grande como los de usos militares. Y cuando se desarrolle plenamente, "transportará hasta 30 kilos". Las estudiantes también acaban de recibir por su proyecto un premio de la Comunidad de Madrid, dentro del Congreso sobre las Aplicaciones de los Drones a la Ingeniería Civil. Y cuentan con otro reconocimiento de la Asociación Nacional de Trasplantados. Su creación demuestra la potencialidad de los alumnos de las universidades públicas gallegas. Y sobre todo de ese gran número de mujeres, que logran las mejores calificaciones académicas pero que después se encuentran ciertas trabas para llegar a lo más alto en el mundo laboral.
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Ébola en Liberia Tras el concurso en Dubái, el propio Gobierno de los Emiratos Árabes invitó a las cuatro estudiantes a participar en un congreso posterior sobre drones. Y el proyecto lanzado desde Ferrol despertó el gran interés del Ministerio de Sanidad de Liberia, que estudia su utilización para el transporte de vacunas contra el ébola.
Microsoft y Google En ese posterior congreso, el Dronlife pudo codearse con otros proyectos de gigantes de la innovación como Microsoft o Google.
Superior a Oxford El equipo docente de la Escuela Universitaria de Diseño Industrial de Ferrol destacó especialmente el hecho de que el Dronlife superase en el concurso a un proyecto impulsado por la NASA y la Universidad de Oxford. Las alumnas acudieron a Dubái, acompañadas por el profesor Eduardo Guillén. Según otro de los profesores de la EUDI, José Ramón Méndez Salgueiro, "nos parece más importante incluso que la universidad pública gallega haya derrotado a la Universidad de Oxford, demuestra la valía de las estudiantes".